Paseo diario para empezar el noveno día de cuarentena. Estirar las piernas una necesidad. Confinamiento en un hotel de 4 estrellas. Con piscina, deporte y vistas al mar, pero al fin y al cabo, encierro obligatorio. Y por eso los días, que faltan para salir se cuentan por horas. Horas que pasan lentas para los 500 clientes en cuarentena. Agradecidos a los trabajadores. Pero con mascarillas para comer, toma diaria de temperatura e imágenes que ya se han convertido en habituales para ellos. Una parte de los huéspedes, los que llegaron después del turista italiano positivo, ya están en casa. Ellos haciendo la cuarentena en Barcelona. Eso sí han perdido todo el dinero de las vacaciones. Sin derecho a indemnización.