El sindicato Unión Sindical de Trabajadores de Seguridad y Servicios (USTSS) presentó el pasado jueves dos denuncias en la Dirección Territorial Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Canarias por la existencia de vigilantes de seguridad trabajando sin medidas de seguridad, como mascarillas o guantes, en el servicio de control del equipaje del Aeropuerto de Gran Canaria y en el complejo hospitalario Insular-Materno Infantil.

El presidente de la USTSS, Guillermo Ramos Quiroz, aseguró que lo que está pasando en la zona de control de pasaje y equipaje en el Aeropuerto es "muy grave" porque los vigilantes de seguridad "no están protegidos contra el coronavirus. Además de las enormes aglomeraciones que se han registrado, que no cumplen ni la distancia de seguridad ni el número de personas permitidas, no han dado mascarillas a los vigilantes porque el jefe de seguridad ha dicho que allí no se pone mascarilla ninguno. Esto es un desastre".

Añadió que este personal de seguridad "está tocando con los mismos guantes a todos los pasajeros. Eso es una barbaridad. Hemos puesto una denuncia urgente en la Inspección de Trabajo y una queja en la dirección general de la Guardia Civil. Estamos hablando de que esto es una guerra con un virus y que hay gente que está infectada. Estamos poniendo en riesgo la seguridad de los trabajadores y de toda la gente".

Ramos recuerda en la denuncia presentada, contra la empresa Ilunión Seguridad y Enaire-Aena, que por los filtros que controlan estos trabajadores pasan cientos de personas e, incluso, "como ya ocurrió algunos infectados, como los que intentaron volver a su país", cuando se detectó el primer caso en Gran Canaria.

"Los vigilantes", recordó, "tienen que cachear a los pasajeros, con el riesgo de contraer el virus en un porcentaje muy alto, debido a que no nos permiten poner mascarilla, alegando la empresa que de hacerlo nos sancionan. Además, los guantes de látex que nos proporcionan no pueden ser cambiados cada vez que haces una inspección a una persona, con lo cual, estamos nosotros mismos contribuyendo a propagar la infección" e incumpliendo el real decreto que estableció el estado de alarma.

En cuanto a los vigilantes de seguridad que trabajan en el complejo hospitalario Insular-Materno Infantil, se ha presentado otra denuncia en la Inspección de Trabajo por similares circunstancias. El sindicato acusa a la empresa Clece y el complejo hospitalario de poner en riesgo a los trabajadores por no facilitarles los equipos de protección que necesitan, ya que en ocasiones no pueden guardar la distancia de seguridad, al ser requeridos por el personal sanitario.

Las denuncias presentadas aseguran que las empresas están incumpliendo varios artículos de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales por no haber dotado a los trabajadores de las medidas adecuadas para proteger su seguridad y salud y más cuando ya se han trasladado las órdenes por parte del Ministerio de Sanidad".

Matos criticó también que "en el centro comercial Carrefour están entrando familias enteras en coches en los aparcamientos y los vigilantes no pueden hacer nada porque el director les dice que no se meta en nada. ¿Como vamos a parar esto si se están produciendo esos riesgos y no se cumplen las medidas de seguridad".