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Crisis del coronavirus Las empresas se reinventan

Aloveria redirige su producción para fabricar gel desinfectante de manos

La empresa dispone de materia prima y capacidad para envasar 25.000 unidades a la semana - La compañía produce este recurso dado la alta demanda del mercado

Muestra de la nueva producción de Aloveria. LP/DLP

La empresa Aloveria, especializada en la elaboración de productos con aloe vera canario, ha paralizado su producción para redirigir todo el trabajo de su laboratorio a la fabricación de gel hidroalcohólico para suministrar a las farmacias y los centros hospitalarios durante este período de crisis sanitaria. Así lo ha confirmado Jorge Marrero, responsable del departamento de Desarrollo, quien ha explicado que la empresa cuenta con las autorizaciones para centrar sus esfuerzos en la elaboración de estas soluciones para satisfacer la alta demanda.

Pionera en el rescate de la medicina tradicional de los antiguos canarios, esta empresa familiar nunca ha dedicado su fábrica a la elaboración de este tipo de geles, pero ha tomado la decisión de hacerlo dada la situación sanitaria en la cual se encuentra el país derivada de la crisis del coronavirus.

"La idea surgió de nosotros mismos y a raíz de la demanda de los clientes; los más jóvenes de la empresa propusimos embarcarnos en este producto para no irnos a un ERTE, no lo vemos como negocio sino para atender al sistema sanitario y mantener a nuestros empleados trabajando", señala el responsable, "así que decidimos introducirnos en este ámbito de forma ocasional". Jorge Marrero ha explicado que en su laboratorio, ubicado en el polígono industrial de Arinaga, producen ahora gel hidroalcohólico siguiendo la fórmula que ofrece la OMS para la elaboración de geles para la limpieza de manos y la desinfección de superficies.

Las reservas de alcohol de las cuales dispone la empresa las ha conseguido a través de un proveedor con el cual lleva años trabajando. "Entre los dos nos hemos puesto de acuerdo para que él facilite la materia prima y nosotros podamos darle el carácter sanitario", relata Marrero. Ahora, esta empresa tiene capacidad para envasar hasta 25.000 botellas de entre 30 y 500 mililitros a la semana. "Podrían ser más, pero esperemos que tenga que ser menos", confía el responsable de Desarrollo.

Alta demanda exterior

A pesar de la capacidad que tiene para producir este material, la dificultad radica en conseguir botellas, todos los ingredientes y cajas, dada la situación de parálisis de gran parte de las empresas no esenciales o porque el producto ya no se encuentra. "Que todo el mundo compre en el extranjero ha provocado que las fábricas de botellas o tapones ya apenas existan", apunta Marrero.

Este producto lo suministrarán a cooperativas farmacéuticas y a hospitales de todo el archipiélago, aunque también le han solicitado mercancía desde la Península y países como Holanda o Alemania, aunque no la enviará. "Dada la situación a nivel global, cada uno dispone de los recursos que tiene; podríamos suministrar a esos países, pero no sabemos en qué condiciones vamos a estar aquí dentro de tres meses y si nos será más necesario aún a nosotros", asevera Marrero, "además, es probable que requisen estos productos en la aduana".

Considerada esta empresa como servicio esencial, está produciendo hasta los fines de semana. "Debemos optimizar todas las máquinas; estamos trabajando para que todas las islas estén atendidas", manifiesta Marrero. En este sentido, y dado el arduo sacrificio de estos días, critica que "muchas veces se consuma más aloe vera de origen chino que dice que es canario en su etiqueta, pero si miras los ingredientes solo tiene alcohol, agua y glicerina, no hay aloe por ningún lado". "Somos una empresa con principios sólidos, con 40 estudios científicos sobre el aloe vera, tenemos la patente de la sangre de drago y siempre desarrollamos productos nuevos con la flora canaria, por eso nos duele el corazón cuando vemos eso", lamenta.

No obstante, para Jorge Marrero producir este gel "supone una satisfacción al saber que hay muchas familias a las que no llega este producto; nos sentimos responsables de cubrir esa carencia". "Nos estamos partiendo el lomo pero vale la pena cuando ves que la población empieza a tener algo que hasta entonces no tenía", reflexiona, "y lo hacemos sin aprovechar la ocasión para hacer el agosto".

Para hacer frente a esta crisis sanitaria por el Covid-19 esta empresa ha tenido que reinventarse. "Nos hemos adaptado, y todo gracias a que la Administración ha dado luz verde rápidamente; nos hemos sentido apoyados", concluye.

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