El sindicato de docentes ANPE ha pedido este miércoles a la Consejería de Educación, Universidades del Gobierno regional que concrete las condiciones en las que se desarrollará el final de curso y su incidencia en las condiciones laborales de los profesores del sistema público.

En un comunicado, la central sindical con más representación en la escuela pública del archipiélago reclama una reunión urgente a la Consejería para negociar cómo será la evaluación del tercer trimestre en todos los niveles educativos, los criterios de progresión de los alumnos y como se recuperará a quien haya tenido problemas para recibir atención educativa durante el confinamiento.

ANPE Canarias hace estas apreciaciones después de que se convocara este miércoles la Conferencia Sectorial de Educación, en la que han participado el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas.

Destaca que en el transcurso de ese encuentro, el Ministerio informó de la hoja de ruta que pretende llevar a cabo en colaboración con las consejerías de cada territorio, pero sin concretar cómo se materializarán, "lo que ha suscitado numerosas dudas entre el profesorado".

Añade que la consejera canaria del área, María José Guerra, intervino en Televisión Canaria y avanzó algunos de estos asuntos, pero aún no se ha dirigido a los enseñantes.

"Necesitamos que la Consejería nos convoque ya para consensuar cada una de las medidas, porque en muchos casos, además, se da margen a cada comunidad autónoma para decidir. Sin embargo, la fecha prevista ahora mismo es el próximo martes, pero es inaceptable dada la incertidumbre que ha generado esta mesa sectorial", advierte el presidente de ANPE Canarias, Pedro Crespo.

En su opinión, los tres bloques que se deben abordar de manera urgente para que los profesores tengan información e instrucciones claras son el final del curso, la progresión escolar y la atención de los alumnos con más dificultades.

Así, la central sindical considera prioritario que se acuerde cómo será la tercera evaluación con el profesorado, ya que es éste el que tiene la información adecuada para concretar las acciones durante el tiempo que resta hasta final de junio.

"Esta decisión se tiene que tomar con los docentes, que somos quienes conocen al alumnado y han hecho todo lo posible por enviarle los contenidos y atenderle durante este mes de cierre de los centros educativos", subraya Crespo.

A su juicio, "el profesorado ha puesto todo de su parte para suplir el déficit de recursos tecnológicos de los estudiantes, y no olvidemos que en Canarias hay 13.500 alumnos con cuota cero de comedor, es decir, con recursos muy limitados".

Con respecto a la progresión escolar, el sindicato entiende la excepcionalidad de la situación que se vive y que hay que adaptar las exigencias académicas a la realidad, pero considera que los profesores tienen información suficiente para evaluar las competencias de los alumnos y profundizar, durante la tercera evaluación, en las que esté más rezagado.

De esta forma, coincide con que para la calificación final se considere las competencias adquiridas por los alumnos, siempre atendiendo las condiciones únicas del tercer trimestre, el único donde, con toda probabilidad, no habrá clases presenciales y, por ello, se tendrá que adaptar a cada alumno.

Por otro lado, ANPE Canarias pone sobre la mesa la necesidad de diseñar programas de refuerzo educativo durante el primer trimestre del próximo curso para atender a los alumnos que hayan tenido más dificultades para seguir las clases a distancia, ya sea por la falta de dispositivos electrónicos o de apoyos familiares.

Asimismo, defiende las adaptaciones curriculares en los casos en los que sea necesario.

Crespo precisa que "los programas de refuerzo durante el primer trimestre del curso 2020-2021 son fundamentales para corregir las desigualdades, pero no se pueden llevar a cabo si seguimos permitiendo clases con 30 alumnos".

Sobre las medidas de refuerzo educativo propuestas para este verano, el sindicato considera acertado ponerlas en marcha, pero afirma que deben tener la consideración de actividades no lectivas porque el calendario escolar vigente concluye el 30 de junio.