La solidaridad de los palmeros y palmeras ha quedado más que demostrada durante estos dos meses en los que la isla también ha sufrido esta terrible pandemia sanitaria, pero última de las muestras llama mucho la atención. Se trata de la donación de una vaca despiezada al Hospital General de La Palma.

Durante todo este tiempo, en el Hospital General de La Palma no sólo se han recibido equipos de protección para el personal donados por empresas, cooperativas y trabajadores; también han llegado hasta termómetros de infrarrojos y pulsioximetros, futas y hortalizas frescas del campo palmero, dulces, batidos y chocolates de dos multinacionales, y hasta vales de descuento en un restaurante de la capital.

Pero quizás, la más sorprendente de estas donaciones ha llegado desde el Matadero Insular. Se trata de una vaca despiezada en esta instalación y que ha sido donada por alguien que no ha querido identificarse.

Desde la dirección del Hospital General de La Palma se ha agradecido esta donación que "como siempre", señalan, se hará llegar a Cáritas.