La devoción que despierta la Mare de Déu dels Desemparats traspasa los límites religiosos. Y es que hay muchos seguidores que, sin ser fervientes católicos ni personas «de Iglesia», sienten pasión por la patrona de Valencia. Ayer, unos y otros, tanto los que se declaran religiosos como los que solo pasan por el templo para rezarle a la Geperudeta (o hablar con ella) tenían claro que no la iban a ver, que eso solo sería posible a través de la pantalla ya que el Arzobispado de Valencia lo había dejado muy claro. Misa sin fieles, un año sin el tradicional traslado que reúne a miles de personas y sin la procesión, con actos online y fervor desde los balcones y ventanas engalanados para la ocasión. Ese era el plan. Pero ayer se fue al traste.

Y es que tras finalizar la misa a puerta cerrada, los responsables de la Basílica sacaron la imagen peregrina de la Mare de Déu dels Desemparats a la puerta del templo. Y así, sin pisar la calle, la Geperudeta se mostró a un público que merodeaba por la plaza y agradeció el momento ya que apenas fueron unos minutos donde los devotos le cantaron el himno y le lanzaron unas «salves». Y otra vez para dentro. Esa puerta se cerró, pero se abrió justo la de al lado.

Eran las 11 horas y el templo podía abrir ya que el decreto del estado de alarma sí permite abrir los centros para el rezo, unas horas al día, cumpliendo con las estrictas medidas de seguridad. Y los fieles, que ya se habían hecho a la idea de no poder ver a la Virgen cambiaron de idea ante la posibilidad de poder hacerlo. La voz corrió como la pólvora y a las 12 horas, Levante-EMV pudo constatar un trajín de gente entrando y saliendo de la Basílica. Había personas con mascarilla y también sin ella. Lo mismo con los guantes y con la distancia de seguridad. Eso sí, un sacerdote le «recordaba» a los fieles que debían entrar con mascarilla, aunque no impedía el paso.

El día de la festividad de la Virgen de los Desamparados

El día de la festividad de la Virgen de los Desamparados

Las patrullas de la Policía Local destinadas a la plaza de la Virgen comprobaron el trasiego de fieles entrando y saliendo del centro y avisaron al Cuerpo Nacional de Policía, que envió una patrulla al lugar. Los agentes no realizaron intervención alguna al entender que ya la había hecho la policía local y salieron del templo mientras los fieles mostraban su fervor al grito de «Visca la Mare de Déu» a su paso.

Algunos devotos se sorprendieron de la visita de los agentes. «No sabíamos que se podía visitar a la Virgen hoy y en cuanto nos hemos enterado hemos venido. No hacemos mal a nadie, es la patrona y es emocionante verla en su día. Siempre venimos a la misa descoberta y al traslado », explica Pilar García.

A su lado, otra familia se organizaba para más tarde. «Ahora hay mucha gente, nos acercamos esta tarde con mi sobrina y así le presentamos al bebé y luego a merendar», proponían. Y es que el templo, como marca el horario de rezo, se cerró a las 13 horas y volvió a abrir de 17 a 19 horas, con un trasiego similar ya que muchos aprovecharon ese horario para visitar a la patrona.

Informe de la Policía Local

La Policía Local de València prepara ya un informe que presentará ante la Delegación del Gobierno, que es quien estudiará si sanciona o no a la Basílica o al Arzobispado por incumplir el artículo 12 del decreto de estado de alarma que es el que regula cómo se debe realizar la apertura de los templos para el rezo y qué medidas se deben cumplir en la fase 0.

El concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, calificó ayer de «irresponsable» al arzobispado porque «no debe llamar a las aglomeraciones y el espectáculo es lamentable. Ha sido una falta de responsabilidad porque la Iglesia no está por encima del resto».