Canarias sumó ayer 102 casos nuevos de coronavirus, la mayor parte de ellos en Gran Canaria y vinculados a los brotes ocurridos entre tres discotecas de la isla. Con estos nuevos diagnósticos, el Archipiélago pasa a tener 638 casos activos y seis de cada diez se encuentran guardando cuarentena en Gran Canaria. Este incremento notable de casos no se vivía desde hace más de cuatro meses y medio, es decir, desde el pasado 31 de marzo, cuando se sumaron 118 casos en un solo día. En aquella jornada que daba por finalizado un marzo excepcional, Canarias terminaba una semana en la que había sumado 723 casos. En los últimos siete días calurosos de este agosto, Canarias ha sumado 464 casos nuevos de los que el 68% se han hallado en Gran Canaria.

E Un contexto dispar a marzo. Sin embargo, el Archipiélago no se encuentra en la misma situación que atravesaba en marzo. Ante una crisis sobrevenida, la sanidad canaria apenas era capaz de diagnosticar los casos asintomáticos o con síntomas leves dada la falta de medios y como mandato de los protocolos sanitarios nacionales, que apostaban por tan solo diagnosticar a los casos más graves. Aún así, los contagios crecían a un ritmo medio diario del 20% y se producían dos muertes diarias en el Archipiélago. En el momento actual, sin la población aislada, la situación, aunque en términos numéricos es semejante, cuenta con algunas diferencias fundamentales. Así, aunque los casos activos son similares a los del 24 de marzo (621), los contagios crecen a un ritmo diario del 2,3%, ha habido dos muertes en toda la semana y la mayor parte de diagnosticados son asintomáticos.

E Solo conocíamos al 10%. Estos datos hacen sospechar que probablemente Canarias se encuentre en un contexto más similar al escenario previo a la primera ola. "En la primera oleada también ocurría esto, pero no se recomendaba el uso de mascarilla ni diagnosticamos asintomáticos", explica el portavoz del comité de expertos asesor del Gobierno de Canarias, Lluís Serra-Majem. Según el epidemiólogo, en marzo tan solo se diagnosticó al 10% de la población afectada, y creen que Canarias ahora puede estar diagnosticando en torno al 40 y el 60% de la población afectada, aunque es difícil de saber con seguridad. "Ojalá estuviéramos en el 80%, porque entonces sería menos preocupante", concluyó Serra-Majem.

E Cambio de perfil. También se ha modificado el perfil tipo de afectado por Covid-19 en las Islas. Mientras en la primera ola el grupo de edad en el que se constataban más casos era el de 40 a 59 años, las tornas hoy han cambiado. Ahora son los menores de 30 los que acumulan más contagios, aunque la mayoría son asintomáticos. Según la Consejería de Sanidad, hasta el 85% de los nuevos casos se dan en este grupo de edad. De ahí que, en el informe diario publicado por la Dirección de Salud Pública, se pueda dilucidar ya que los jóvenes de 20 a 39 años suman el 31% de los casos que se han diagnosticado en el Archipiélago desde que comenzó la pandemia. Los jóvenes no son los más perjudicados por la Covid-19 -aunque se han dado casos graves-, pero son los principales transmisores de la enfermedad en la población. De ahí que, tanto el consejero de Sanidad, Blas Trujillo, como el presidente del Gobierno autonómico, Ángel Víctor Torres, hayan apelado en distintas ocasiones a la responsabilidad de este colectivo. "Veremos si este fin de semana actuamos de forma responsable", insistió Torres al finalizar la rueda de prensa donde presentó las nuevas medidas de restricción de los contagios para Canarias.

E Repunte de ingresos en Gran Canaria. El indicador que puede poner sobre la mesa la posibilidad de volver a confinar a la población canaria será la capacidad asistencial. En el día de ayer se sumaron ocho nuevos ingresos hospitalarios, con lo que actualmente hay 37 pacientes en planta y dos en UCI. La mayor parte de los pacientes se reparten entre el Hospital Materno Infantil, el Hospital Dr. Negrín, el Hospital San Juan de Dios y el Hospital Universitario de Canarias. En tan solo 13 días, el número de ingresos se ha incrementado en 160% en las islas capitalinas, pasando de los 15 hospitalizados del día 1 de agosto a 39 ayer. Pero el aumento no ha ocurrido a la par en ambas. Mientras que en Tenerife han aumentado un 50%, en Gran Canaria los ingresos hospitalarios se han incrementado en un 460%, con un repunte importante en los últimos cuatro días. Por ahora, la capacidad asistencial "está garantizada", remarcó Serra-Majem, que recordó que "hemos tenido suerte de no llegar nunca al colapso, ni siquiera durante la primera ola". En estos momentos hay 1.844 camas libres disponibles en los hospitales canarios, tanto públicos como privados. De estas, 1.552 son camas hospitalarias de ingreso, 53 son unidades críticas sin respirador y 239 son unidades para cuidados intensivos con respiradores.

E Un control policial más duro. No obstante, la situación podría dar un vuelco si no se garantiza el cumplimiento de las medidas de seguridad sanitaria recomendadas e impuestas por las autoridades: llevar mascarilla, guardar la distancia de seguridad y realizar un buena higiene de manos. En este sentido, el comité de expertos, que se reunirá durante el día de hoy, volverá a insistir en la necesidad de "endurecer las medidas para hacer cumplir las normas", incluso llegando a la sanción si fuera necesario. "De nada sirven las normas si no se hacen cumplir", sentenció. De hecho, y como confirmó el epidemiólogo, "si se cumpliera, no había que confinar", pero no descarta recomendarlo desde el comité de expertos hacerlo "si la cosa se complica". En este sentido, también se manifestó el jefe de la sección de epidemiología de Salud Pública del Gobierno de Canarias, Amos García Rojas, que insistió en que un nuevo confinamiento "va a depender de la situación de los ámbitos", así como de "cómo se desarrolle el problema". "Si esta situación va a más, nuestra recomendación va a ser clara", afirmó García Rojas que, incluso en esas circunstancias, consideró que puede no ser necesario realizar un confinamiento a toda la población, sino que, en su lugar, se podrían realizar aislamientos selectivos a la población.

E La velocidad de propagación se dispara. Lo cierto es que Canarias ha mantenido a raya el virus durante prácticamente un mes, pero estas dos últimas semanas su velocidad de propagación se ha incrementado progresivamente. En la última semana de julio, los nuevos casos aumentaban a un ritmo medio diario del 0,3%. Un porcentaje que se incrementó hasta el 1,2% en la primera semana de agosto y ha vuelto a crecer hasta el 2,5% diarioesta semana. Estos datos denotan una tendencia ascendente y exponencial de los contagios que tiene su origen en la capacidad de dispersión del virus (R0) que se sitúa de manera natural en 2,65. Esto significa que cada persona positiva en Covid-19 puede contagiar a casi otras tres. Este número se puede incrementar dependiendo de las condiciones ambientales en las que se produzca el contagio y el tiempo en el que se esté expuesto al patógeno. Será más probable que se produzca un contagio masivo en un lugar cerrado y sin ventilación que en un espacio al aire libre en el que todos porten mascarilla.