Los médicos adjuntos del Servicio de Urgencias del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria difundieron este fin de semana un comunicado a través de las redes sociales para instar a la ciudadanía a hacer un uso racional del área, ante la notable expansión de la pandemia de Covid-19 en la Isla. " Estamos siendo testigos directos de la más que gravísima situación que está suponiendo la segunda oleada de la pandemia. En los últimos diez días vemos cómo están aumentando casos de forma exponencial, poniendo en riesgo el colapso del sistema sanitario. Nuestra responsabilidad es atender a todas aquellas personas que llegan por clínica sospechosa de Covid-19, así como a todas aquellas que llegan por otras patologías", expone el escrito difundido por el doctor Víctor Pons, que ejerce su actividad profesional en el servicio de Urgencias del citado complejo capitalino, y que suscriben los 28 adjuntos del área.

Asimismo, los sanitarios ponen de relieve los casos clínicos que están precisando una mayor supervisión médica. "Hay que tener en cuenta que cada vez es mayor la atención a inmigrantes que llegan en pateras con una alta tasa de infección, por lo que hay que considerarlos a todos como casos positivos. Tampoco es desdeñable la cantidad de pacientes internados en residencias sociosanitarias, así como en los dos centros penitenciarios de la isla, los cuales forman parte de la zona Sur y, por tanto, son responsabilidad del Hospital Insular. Por último, destacar la cada vez más creciente población Covid, que son todos aquellos pacientes positivos que demandan asistencia por algún motivo que nada tiene que ver con la Covid-19. Nuestra responsabilidad es atenderlos a ellos y a sus contactos estrechos en igualdad de condiciones de protección y de aislamiento, tanto para los pacientes como para el personal", detallan los médicos en el texto.

Teniendo en cuenta todo esto, los profesionales no dudan en subrayar que los recursos humanos y materiales son "limitados", por lo que hacen un llamamiento a la responsabilidad ciudadana para que el espacio pueda funcionar correctamente. "Pedimos que se haga un uso racional de los servicios de Urgencias, tanto hospitalarios como extrahospitalarios, y que se acuda únicamente en aquellos casos de verdadera necesidad", insisten. Si bien es cierto que el doctor Pons quiso aclarar ayer que el propósito del comunicado "no es alertar a la población", sino crear conciencia colectiva. "Solo queremos dar a conocer la situación que estamos viviendo y hemos usado las redes sociales para informar. No pretendemos denunciar nada ni acusar a nadie", sentenció el especialista.

Lo cierto es que el número de pacientes que han precisado ingreso en las Islas como consecuencia de las complicaciones asociadas al Covid-19 ha ido incrementando a un ritmo muy acelerado en el transcurso de las últimas semanas, especialmente en Gran Canaria, la isla más castigada por esta segunda ola del patógeno. Siguiendo esta línea, hasta el domingo 16 de agosto, en los hospitales del Archipiélago había 47 personas en planta y seis en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCIs), mientras que ayer el cómputo se repartía en 169 y 28, respectivamente.

Ya desde el pasado 21 de agosto, los hospitales de Gran Canaria -que cuentan con 127 afectados en planta y 21 en intensivos- activaron el Plan de Contingencia para incrementar las camas de críticos y de asistencia a las personas infectadas por el virus. Según los últimos datos que maneja la Consejería de Sanidad del Gobierno autonómico, en el Complejo Hospitalario Universitario Insular- Materno Infantil (Chuimi) hay 38 enfermos en planta y nueve en críticos. Por su parte, el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín ya reúne a 85 afectados en planta y a más de una decena en UCI. El resto de pacientes ingresados se concentra en centros de carácter privado.

Las cifras evidencian, por tanto, que la demanda asistencial es cada vez mayor. Según fuentes consultadas ayer, en el Hospital Insular la dirección ha planteado al personal realizar "guardias voluntarias" para poder abordar a estos pacientes, teniendo en cuenta que parte de la plantilla está disfrutando de sus vacaciones.

Las mismas fuentes indicaron que, como consecuencia del importante aumento de los cuadros activos en la Isla, el Materno ya tiene habilitadas la planta ocho para casos Covid y un ala de la planta quinta para asistir a las mujeres embarazadas que han dado positivo en las pruebas PCR. Asimismo, el Insular tiene reservadas las alas Norte de las plantas siete y 11. El Negrín, en cambio, dispone de dos alas en la cuarta planta y ya tiene un área acondicionada en la sexta para futuros ingresos.

Tal y como confirmó ayer la administración sanitaria, "se irán habilitando más camas en función de la demanda, y los hospitales cuentan con el material necesario para poder tratar a los enfermos. Todos se están adaptando a la situación que se está viviendo, atendiendo al Plan de Contingencia que estaba marcado antes de entrar en la nueva normalidad".