Un estudio de la Universidad de Warwick (Reino Unido), realizado durante 20 años a 20.000 personas, concluía que los casados viven una media de tres años más que los solteros. En Canarias ocurre lo contrario, hay más solteros y menor mortalidad.

Así lo indican los resultados de la encuesta Movimiento Natural de la Población correspondiente a 2010, publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), donde las Islas despuntan como la Comunidad española donde se celebran menos bodas y menos entierros.

El Archipiélago tiene la tasa de nupcialidad más baja de España, con 2,71 casamientos por mil habitantes frente a una media nacional de 3,67. En 2010 se celebraron un total de 5.667 bodas en las Islas, frente a 5.916 a lo largo de 2009.

Por otra parte, es la segunda comunidad, detrás de Melilla (5,51), que cuenta con la tasa de mortalidad más baja del Estado, con 5,81 defunciones por cada mil habitantes, cuando la media española es de 8,22. En total, hubo 12.159 defunciones durante 2010 en las Islas, frente a 12.896 el año anterior.

Con estos datos no sorprende que también se haya producido en el último año un descenso en el número de nacimientos, parámetro en el que las Islas se sitúan los cuartos por la cola.

El pasado año se registraron 18.179 nacimientos en el Archipiélago frente a los 18.952 en 2009. La tasa bruta registrada en 2010 es de 8,69 alumbramientos por cada 1.000 habitantes frente a una media nacional de 10,51. Por encima de las Islas en menor tasa de nacimientos se colocan Asturias (7,39), Galicia (8,07) y Castilla y León (8,24).

Aun con todo, Canarias sigue registrando un crecimiento demográfico positivo. El número de nacimientos es superior al de fallecidos, y esto coloca al Archipiélago entre las comunidades con un mayor crecimiento vegetativo o natural de la población (diferencia entre el número de nacidos y el de fallecidos en un año), sólo superados por Madrid, Andalucía, Cataluña, Valencia y Murcia. Las comunidades donde el crecimiento vegetativo de la población fue negativo son Galicia, Castilla y León, Asturias, Extremadura y Aragón. En todas ellas el número de defunciones superó al de nacimientos.

Los resultados canarios están en consonancia con la media nacional que registra un descenso en natalidad, bodas y mortalidad. En total nacieron en España 484.055 bebés en 2010, lo que supone una reducción de casi un 2% respecto al año anterior, y la tasa bruta de natalidad (por 1.000 habitantes) se situó en 10,51, el nivel más bajo desde 2003.

La Encuesta del INE refleja también que la esperanza de vida al nacer aumentó el pasado año hasta los 82 años y es mayor entre las mujeres (84,9 años) que entre los varones (78,9).

El descenso del número de nacimientos se produce por segundo año consecutivo después de diez años de continuo crecimiento, situación que obedece, según el INE, a un descenso progresivo del número de mujeres en edad fértil.

También se redujo el número total de fallecidos (378.667) respecto al año anterior y el crecimiento vegetativo se situó en 105.388 personas, el nivel más bajo desde 2005.

El número de matrimonios el pasado año en el Estado se situó en 169.020, lo que supone un descenso del 3,6% respecto a las cifras del año anterior y en el 21,5% de las bodas que se celebraron al menos uno de los cónyuges era extranjero, porcentaje similar al de 2009.