Los colegios profesionales del ámbito sanitario de Canarias pedirán en el Parlamento regional que la modificación del Régimen Económico y Fiscal (REF), que planean las fuerzas políticas a medio plazo, incluya severas o totales restricciones a la promoción del consumo de tabaco en los lugares a la venta en el Archipiélago. Un aspecto este que el modelo fiscal actual de las Islas ampara frente a lo que dispone la reforma de la Ley de Prevención del Tabaquismo, que entra en vigor a partir del domingo, 2 de enero.

Pese al activismo de los profesionales sanitarios y del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) en la modificación de esa norma, el REF canario impide, como ya ocurriera con la ley anterior que entró en vigor en enero de 2006, prohibir la promoción de los productos tabáquicos en cualquier lugar que se disponga para su venta.

En este sentido, el Comité y los colegios de Médicos, Dentistas, Enfermeros, Farmacéuticos y Psicólogos de Canarias, han firmado un manifiesto publicado coincidiendo con la entrada en vigor de la nueva ley en la que formulan esa petición. "Pedimos a las autoridades del Archipiélago", señala el texto, " que por ser de su competencia, limiten y controlen estas actividades de promoción, que en la Península, a diferencia de Canarias, están reservadas a los estancos (donde no pueden acceder los menores), y se arbitre un sistema que proteja a todos los canarios especialmente a los más jóvenes de las agresivas estrategias de la industria tabaquera".

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Al respecto, Francisco Rodríguez Lozano, vicepresidente del Comité Nacional y su delegado en Canarias, ha explicado a este periódico que los firmantes del manifiesto "aceptan" la libertad de venta del tabaco en distintos puntos, frente a los sitios restringidos (estancos) del resto del Estado, que ampara el REF. "Pero se pueden dictar medidas para controlar la promoción del consumo de tabaco, que aquí se puede realizar en cualquier punto de venta al que tienen acceso los menores".

Al respecto, el médico estomatólogo recordó que la protección a los menores frente al consumo es indispensable. "Se sabe que un chico, a partir de los 20 ó 21 años, ya es muy difícil engancharle si ha decidido no ser fumador. Igual que es ampliamente conocido que cada vez es más temprana la edad en la que se inician los menores, con 12 ó 13 años en Canarias".

A eso hay que añadir que está acreditado, según el vicepresidente y delegado en Canarias del CNPT, que una mayor accesibilidad al producto aumenta la probabilidad de iniciarse tempranamente en el hábito del tabaquismo.

Paradójicamente, esa situación se produce en un contexto, el de las Islas, en donde los precios e impuestos del tabaco son más bajos que en resto del territorio del Estado. "En la Península, por ejemplo, una cajetilla puede costar tres veces más. Y en el Reino Unido, vale hasta 10 veces más de una de las marcas más vendidas".

La diferenciación en Canarias en cuanto a la venta y promoción del tabaco marca el balance de la nueva reforma de la ley, prevista desde el 2 de enero.

Según los firmantes del manifiesto, "nos queda sin embargo cierto sabor agridulce al comprobar que en Canarias, debido a la singularidad de nuestro régimen económico y fiscal, se pueda vender tabaco prácticamente en cualquier sitio, por lo que según la ley se permitirá promocionar el tabaco en casi cualquier lugar, y esto es lo verdaderamente grave".

Por eso señalan que "lamentamos que un régimen (el REF) que pretende aportar beneficios a la economía de las Islas pueda ocasionar perjuicios a la salud, especialmente en nuestros menores, muy sensibles a las actividades de promoción de la industria tabaquera".

Satisfacción

Con todo, los profesionales sanitarios aplauden la nueva regulación del consumo de tabaco y se declaran "satisfechos".

A juicio de los firmantes del manifiesto, esta ley era necesaria porque "el humo ambiental de tabaco es un problema de salud pública y el tabaquismo pasivo es causa de enfermedades y muertes evitables. A partir de ahora se garantiza la protección de la salud de los trabajadores de la hostelería y de toda la población que acude a ellos".

Asimismo, declaran que con la nueva ley "se evitan situaciones de discriminación al igualar las condiciones de todos los establecimientos de hostelería con una ley más clara que la que teníamos hasta ahora".

La reforma de la Ley de Prevención del Tabaquismo vigente desde enero de 2006, también era necesaria, a juicio de los firmantes del manifiesto, porque colabora en la tarea de hacer pedagogía acerca de los riesgos del tabaco. "Se contribuye a la desnormalización de la conducta de fumar", señalan los colegios profesionales sanitarios en el texto, al que se suma también el Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo".

Al mismo tiempo, los profesionales de la salud consideran que "la prohibición de fumar en todos los espacios públicos, y especialmente en los parques infantiles, es una medida modélica y muy eficaz para hacer que disminuya la aceptación social del tabaco, evitando así que los jóvenes se inicien en su consumo y contribuyendo a que a muchos fumadores les sea más fácil abandonarlo".

Precisamente, es la protección de los menores frente al riesgo de la habituación tabáquica en edades tempranas lo que va a mantener el activismo de los profesionales del ámbito sanitario en la comunidad autónoma de Canarias.

"El REF se va a modificar pronto. Y ese es el momento en el que intentaremos presionar para que se reglamenten las restricciones oportunas frente a la promoción de los productos que son nocivos para la salud, no sólo el tabaco".