Cuando los profesionales del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín realizaron el primer trasplante de corazón en el centro hospitalario en la madrugada del jueves 5 de diciembre de 2019, difícilmente imaginarían lo que sucedería meses después. Y es que, no solo se ha logrado poner en marcha el Programa de Trasplante Cardíaco con un elevado nivel de éxito sino que, además, se ha conseguido en el marco de una pandemia que ha sacudido de forma brutal los cimientos de un mundo globalizado cuyos ciudadanos siguen atónitos día tras día la evolución de esta crisis. Hoy se celebra el Día Mundial del Corazón, una efeméride muy especial para los profesionales que forman parte del Negrín, un centro que ya se ha realizado 11 trasplantes cardíacos.

La sociedad canaria aspiraba desde hace años a disponer de este programa, que evitaría a los pacientes desplazamientos a la Península y permanecer durante meses, e incluso años, alejados de sus familias. “El hecho de que los pacientes permanezcan en casa, tratados de manera integral por sus médicos, con todo lo que esto supone para su recuperación es fundamental”, argumenta Francisco Portela, jefe del servicio de Cirugía Cardiovascular y cirujano encargado de realizar este tipo de intervenciones quirúrgicas en el citado hospital grancanario.

Cabe destacar que en los últimos diez años, más de 120 pacientes del Archipiélago viajaron a la Península para someterse a un trasplante de corazón. Por eso, el doctor Portela incide en la relevancia que encierra para Canarias “disponer de un programa de estas características que repercute de forma directa en el bienestar de los ciudadanos de las Islas”.

El objetivo fundamental del programa de Trasplante Cardíaco es mejorar la atención de los pacientes con insuficiencia cardíaca avanzada, patología cardiovascular del siglo XXI que se caracteriza por su elevada y creciente prevalencia e incidencia en todos los países desarrollados.

Oportunidades

“Ofrecer mejores oportunidades de tratamiento a los pacientes canarios y permitir también la óptima utilización y resultados de los corazones ofertados por los donantes cardíacos de esta comunidad autónoma son los objetivos a largo plazo de este Programa”, señala Antonio García, facultativo del Servicio de Cardiología del centro hospitalario.

Son numerosos los profesionales que se implican en la atención y en los cuidados de estos pacientes. Los doctores Antonio García, José Luis Romero y Marival Groba, junto a la enfermera de la Unidad de Insuficiencia Cardíaca del Hos Elvira Martín, son algunos de los especialistas que permanecen, día a día, pendientes de la evolución de estos pacientes.

No obstante, como ellos mismos recuerdan, la piedra angular de este importante trabajo en equipo radica en el donante. Sin el gesto solidario y altruista de la donación, también mantenido por la sociedad canaria en estos tiempos de pandemia, habría sido imposible realizar ni uno solo de estos trasplantes. Por este motivo, los profesionales implicados en este proyecto reiteran que la mayor fortaleza de la iniciativa es la propia sociedad canaria.

Precisamente, Isaac Hernández y Miguel Ángel Morales son dos de los pacientes que han tenido la oportunidad de tener “una nueva vida”, gracias, por encima de todo, a la solidaridad de los donantes, puesto que como ellos mismos afirman “sin los donantes y sus familias nada de esto podría ocurrir por muchos avances que se tengan. Se termina una vida, pero eso tan triste puede suponer una gran esperanza para otra persona”, indica Isaac Hernández. Caminar sin cansarse y hasta hacer ejercicio en bicicleta es algo al alcance de Hernández, gracias a la intervención a la que fue sometido.

Ángel Morales, uno de los pacientes que se ha beneficiado de este programa, en una revisión médica reciente para valorar su evolución.

Miguel Ángel Morales, por su parte, quien ha acudido recientemente al centro hospitalario para someterse a una revisión tras el trasplante recibido hace varios meses, no puede evitar emocionarse cuando se refiere a todo el equipo que hizo posible que hoy en día pueda tener una vida normal. “Desde los médicos hasta las enfermeras, las personas de la limpieza, realmente, todo el mundo ha tenido un trato extraordinario con nosotros”, señala. Pasar de dar apenas unos pequeños pasos con gran esfuerzo a poder dedicar horas trabajando en su huerto “es algo que no puedo explicar con palabras”, comenta.

Crisis sanitaria

Desde que en marzo comenzara la crisis sanitaria generada por el Covid-19, el hospital ha realizado un total de siete trasplantes de corazón. La recomendación de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) ha sido mantener abiertos los diferentes programas en función de la situación particular de cada centro hospitalario. A diferencia de lo que ha ocurrido en otros centros trasplantadores del país, las circunstancias vividas en el Negrín han permitido mantener intactas las posibilidades de tratamiento a los canarios que lo han necesitado. Según los últimos datos publicados por la ONT, en el contexto de la primera ola de esta pandemia en Canarias se realizaron más del 50% de los trasplantes cardíacos no urgentes de todo el territorio nacional.

Para poder llevar a cabo un trasplante es necesaria la participación de unos 100 profesionales, mayoritariamente sanitarios y, en muchas ocasiones, incluso procedentes de otros centros hospitalarios del propio lugar donde puede generarse la donación. Además, es imprescindible la implicación de personal de limpieza, comunicaciones y numerosos profesionales poco visibles, pero cuya colaboración resulta fundamental.

De hecho, el coordinador hospitalario de trasplantes del centro, Vicente Peña, junto a la enfermera coordinadora, Arántzazu Anabitarte, resaltan “el importante trabajo que realizan también aquellos profesionales extrahospitalarios, personas anónimas de cuerpos de seguridad, servicios de Emergencias, juzgados, compañías aéreas o seguridad aeroportuaria, cuyo esfuerzo, implicación y colaboración son imprescindibles. Todos ellos merecen un reconocimiento público por su gran labor”.

Un regalo esperado

Para muchos enfermos, la puesta en marcha del Programa de Trasplante Cardíaco en el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín ha sido “un regalo”. De hecho, el más que previsible incremento del número de pacientes que van a necesitar un trasplante en el futuro en Canarias, el aumento progresivo de donantes generados en las Islas en los últimos años, la mejora en los medios de preservación cardíaca y otros avances tecnológicos aseguran, en este momento, la viabilidad de este proyecto. El Negrín realizó esta primera intervención quirúrgica durante la madrugada del 5 de diciembre y la operación cumplió con las expectativas de los profesionales.