La sonda china Chang'e 5 ha terminado sus maniobras de recogida y almacenaje de muestras de la superficie lunar, informó hoy la Administración Nacional del Espacio de China (ANEC).

"A las 22.00 del 2 de diciembre (14.00 GMT), después de 19 horas de trabajo en la superficie lunar, la Chang'e 5 concluyó con éxito la recogida de muestras y se empaquetaron y almacenaron como estaba previsto", indicó la ANEC en un comunicado publicado en su página web.

Las muestras se recopilaron de dos formas diferentes: en la superficie de la Luna, gracias a un brazo robótico, y bajo tierra, a través de un taladro que perforó dos metros el satélite para obtener muestras variadas que podrían datar de periodos muy anteriores.

El material recogido se almacenó después de un recipiente sellado al vacío para "asegurar que no le afectan las condiciones externas durante el regreso a la Tierra", apuntó el texto.

Se espera que en las próximas horas la Chang'e 5 emprenda el regreso a la Tierra, y está previsto que aterrice en la región septentrional china de Mongolia Interior a lo largo de este mes.

Este martes, la sonda alunizó con éxito en un área al norte del Mons Rümker, en el Oceanus Procellarum, en la cara visible de la Luna, una zona no visitada hasta la fecha ni por astronautas ni por misiones espaciales no tripuladas.

Tercer país en conseguir roca luna

De completarse con éxito, la misión convertiría a China en el tercer país capaz de recolectar muestras lunares después de que anteriormente lo hicieran Estados Unidos y la extinta Unión Soviética en la década de 1970.

La Chang'e 5 se lanzó el pasado 24 de noviembre mediante un cohete Larga Marcha-5, que ya llevó al espacio con éxito la primera misión china a Marte, la Tianwen-1, el pasado 23 de julio, y cuya llegada al planeta rojo se prevé para el próximo mes de mayo.

Por su parte, el programa Chang'e (bautizado así en honor a una diosa que, según la mitología china, vive en la Luna) comenzó con el lanzamiento de una primera sonda orbital en 2007.

El país asiático realizó su primer alunizaje en 2013 y, en enero de 2019, logró que la sonda Chang'e-4 se posara en su cara oculta -donde todavía permanece-, un hito nunca logrado antes en la historia de la exploración lunar.

El objetivo final del programa es una misión tripulada a la Luna y la construcción de una base científica en el satélite, aunque no se ha fijado la fecha para ello.