Un total de 6.008 personas fallecieron en las islas sin recibir la atención a la dependencia, según la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, que valora que Canarias sea la cuarta comunidad en la que más ha aumentado el número de beneficiarios con prestación.

En concreto, y según un comunicado difundido este lunes por la citada Asociación, en Canarias fallecieron 3.004 personas en lista de espera por este tipo de atención, otras 2.080 pendientes de valorar y 924 cuando se encontraban en lo que los gerentes de Servicios Sociales denominan "limbo" de la dependencia.

Añaden también que solamente en nueve comunidades autónomas ha aumentado el número de personas beneficiarias con prestación respecto a noviembre de 2019, y donde más se han incrementado es en la Valenciana (15,0%, con 13.008 personas más), Asturias (13,8%, con 2.924 personas más), Baleares (11,0% interanual, con 2.268 personas beneficiarias con prestación más) y Canarias (8,1% interanual, con 1.888 personas más).

De acuerdo a los datos de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, y el informe elaborado por el Ministerio de Derechos Sociales en el que se analiza la mortalidad de las personas del Sistema de Atención a la Dependencia, en el conjunto de país 4.339 personas fallecieron en noviembre en las listas de espera de la dependencia, y ya son 51.540 fallecidos en lo que va de año (31.976 dependientes con derecho y 19.564 pendientes de valorar).

Cada nueve minutos fallece una persona en el laberinto burocrático de la ley, afirman los directores y gerentes de Servicios Sociales, que aseguran que se está abandonando sin atenciones a las 381.115 personas que están a la espera de la ley de dependencia.

El 82% de los fallecidos tenía más de 80 años (35.179 personas). Y el 37% se ha producido en personas con GRADO III.

Se observa un impacto muy elevado en la mortalidad excesiva en personas atendidas en residencia con 21.513 usuarios (8,6% del total de personas dependientes atendidas en residencias).

La tasa de dependientes fallecidos en residencia fue de 219 por cada 1.000 y las mayores tasas del año se registraron en Madrid (307), Castilla La Mancha (281) y Cataluña (259).

En el mes octubre las CCAA con una mayor tasa de personas fallecidas con prestación en residencia por cada 1.000 fueron la Comunidad Foral de Navarra (24,5 personas beneficiarias con prestación en residencia fallecidas de cada 1.000 en septiembre), Andalucía (24,2) y la Región de Murcia (23,9).

De enero a noviembre de este año, 41.494 dependientes fallecieron con prestación de atención residencial y de marzo a junio de este año el número de dependientes fallecidos en residencias ha sido de 22.095 (10.702 más que en el mismo periodo del año pasado, con un exceso en la tasa de mortalidad del 94%.

De julio a noviembre comparando los dos años el exceso de esta tasa ha sido del 6% con 708 fallecidos más que en el mismo periodo del año pasado.

En octubre el comportamiento fue contrario al resto del año, ya que el exceso de mortalidad en personas con atención en residencia fue inferior que en apoyo en el domicilio.

En personas dependientes con servicios de proximidad (ayuda a domicilio, centro de día...) los fallecidos en exceso en lo que va de año fueron 10.497 personas (un 2,38% sobre el total).

El impacto de la covid -19 en el Sistema de atención a la Dependencia ha sido "catastrófico, retrocediendo en los indicadores importantes y generando mucho dolor, sufrimiento y muerte a miles de personas en situación de dependencia y sus familias", se indica en el comunicado.

Añade que en los Presupuestos Generales del Estado para 2021 se revierten los recortes del sistema "y hay que felicitar al Gobierno de coalición por ello" pero, al mismo tiempo, insisten en que urge lograr los acuerdos necesarios en el Consejo Territorial para poder implementar de manera inmediata el reparto del nivel acordado y la asignación del nivel mínimo.

"Sería imperdonable que, dado lo dramático de las cifras, los electoralismos cortoplacistas y tacticismos de todo tipo y color que, por desgracia, caracterizan a la política española en los últimos años, se antepusieran a la solución de la auténtica emergencia humanitaria que están viviendo las personas dependientes", advierten.

Añaden que cada nueve minutos en España fallece una persona "en el laberinto burocrático" de la Ley y que, desgraciadamente, a las 51.540 personas que fallecieron este año, los presupuestos no les llegaron a tiempo.