Anoche se pudo vislumbrar el gran acontecimiento que cierra astronómicamente el 2020: la gran conjunción de Júpiter y Saturno. El fenómeno conocido popularmente como la Estrella de Belén se dejó ver en su totalidad justo al caer el sol y durante aproximadamente una hora. Saturno se colocó por encima de Júpiter creando el efecto óptico de que los dos planetas estaban unidos en un único punto de luz brillante. Canarias fue uno de los enclaves desde donde se disfrutó de la inusual estampa con mayor claridad. Los astrónomos explican que este espectáculo, que fue visible ayer con una intensidad que no se veía desde 1623, no se volverá a ver hasta el año 2080.

La gran conjunción planetaria empezó a ser visible en países del hemisferio norte como Japón, donde a las 9 de la mañana (hora canaria) ya pudieron disfrutar del raro fenómeno astronómico. Una curiosidad de la retransmisión desde el país asiático es que, durante un momento, Júpiter dejó ver sus satélites y una estrella se coló en medio de los satélites y el planeta, dando la sensación de que también era un satélite del quinto planeta del sistema solar.

La danza de Júpiter y Saturno | LP/DLP

Para la observación desde España, la Federación Astronómica organizó para todos aquellos que no podían verlo bien desde casa o el lugar en que se encontraran en el momento de la conjunción, una retransmisión en directo desde diversos observatorios repartidos por la geografía nacional a través de unos telescopios conectados a unos ordenadores. Según explicó durante la retransmisión Joaquín Álvaro, miembro de Europlanet, la conjunción no se ha dejado ver con claridad desde todos los puntos del país. Por ejemplo, desde Cuenca la niebla y las condiciones atmosféricas no facilitaron la observación. En Málaga, Júpiter dejó de ver sus satélites más importantes, y Saturno también se dejó ver con muy buena claridad.

La danza de Júpiter y Saturno

Aunque ayer las condiciones meteorológicas de la Península fueron complicadas, y en algunas zonas las nubes no permitieron ver demasiado, en otros puntos sí se pudo contemplar Júpiter con sus nubes gaseosas y los famosos anillos de Saturno. Las imágenes que se han visto en el firmamento han dejado un recuerdo que no volverá a repetirse, como mínimo, hasta dentro de 60 años.

La gran conjunción de Saturno y Júpiter, que no volverá a aparecer hasta 2080, es la unión aparente de los dos planetas más grandes del sistema solar haciendo parecer que han chocado en un solo cuerpo, a pesar de que pasarán el uno del otro separados por 724 millones de kilómetros. A la izquierda, el acercamiento de los planetas visto desde Barcelona. A la derecha, el fenómeno óptico desde Santa Pola, Alicante. |

La noche más larga del año


El invierno, que se estrenó ayer a las 10.02 minutos, y que durará 88 días y 23 horas, hasta el 20 de marzo con la llegada de la primavera, estará dominado por el brillo de los planetas Venus, Mercurio, Júpiter y Saturno. A lo largo de la estación, la más corta del año, no se producirá ningún eclipse y la primera luna llena del invierno llegará el día 30 de diciembre. Ayer fue el día más corto del año y en Las Palmas de Gran Canaria, por ejemplo, la duración fue de 10 horas y 19 minutos, a comparar con las 13 horas y 53 minutos que duró la jornada más larga del año, el pasado 21 de junio. | LP / DLP