La Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias ha declarado la situación de alerta a partir de mañana por la previsión de mal estado del mar, con viento fuerte racheado y olas de hasta cinco metros, especialmente en el litoral norte y oeste de las islas.

La declaración de alerta se ha adoptado en función de la predicción de la Aemet y en aplicación del Plan Específico de Emergencias de Canarias por Riesgos de Fenómenos Meteorológicos Adversos, según ha comunicado este jueves el Gobierno canario.

En concreto, a partir de las 06:00 horas del viernes se espera mal estado del mar, especialmente en el litoral norte y oeste de las islas, con viento fuerte y racheado y oleaje de mar combinada de 3 - 5 metros.

También se espera viento del noroeste en las islas occidentales y del oeste rolando a noroeste en las orientales a mediodía, de fuerza 6 - 7 con áreas de fuerza 8 en alta mar al norte de Lanzarote y una velocidad media de 40 - 60 kilómetros por hora con áreas de 60 - 70 kilómetros por hora en alta mar al norte de dicha isla.

Además habrá fuerte marejada, mar gruesa y mar de fondo del oeste y noroeste de 2 - 4,5 metros.

El Ayuntamiento capitalino activa el PEMULPA ante la alerta por viento

El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria declara este viernes, a partir de las 06:00 horas, la alerta por fenómenos costeros, en aplicación del Plan de Emergencias Municipal (PEMULPA) y siguiendo instrucciones de la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, al tiempo que mantiene la alerta por vientos en el territorio capitalino.  

El Consistorio, a través de la Dirección General de Seguridad Ciudadana, mantiene activo el PEMULPA para atender cualquier emergencia que pueda producirse como consecuencia de esta situación.  

Ante la alerta, el Ayuntamiento plantea una serie de recomendaciones como proteger su vivienda ante la posible invasión de agua del mar, no situarse en el extremo de muelles o espigones ni arriesgarse a sacar fotografías o vídeos cerca de donde rompen las olas. 

También evitar la pesca en zonas de riesgo, no circular con vehículos por carreteras cercanas a la línea de playa y nunca se bañe en playas apartadas porque puede haber remolinos locales. 

Hay que evitar bañarse en las playas con bandera roja, en zonas donde haya fuerte oleaje y resaca o que carezcan de servicios de vigilancia y salvamento, así como evitar realizar prácticas deportivas y náuticas en las zonas afectadas por la mar de fondo y no acampar en la playa cuando haya alerta por temporal de mar. 

Si se aprecia cierto oleaje fuera de lo normal, no permanezca cerca del mar, ni se acerque aunque se calme de repente. Si dispone de embarcación procure asegurar su amarre en un ligar resguardado. Además, si ve a otras personas en sitios peligrosos adviértales del peligro. 

Si cae al agua apártese de donde rompen las olas, pida auxilio y espere a que le rescaten. Si intenta salir y es arrastrado por el oleaje, procure calmarse; no nade contracorriente y déjese llevar. Por lo general, las corrientes costeras pierden intensidad en otros tramos y es entonces cuando debe nadar.  

Si está en tierra y ve que alguien ha caído al agua tírele un cabo con un flotador o cualquier otro objeto al que pueda aferrarse.