Aunar las políticas de igualdad, tanto de género como sociales, en un vicerrectorado es la propuesta de Robaina en este ámbito. Una visión que no comparte la candidatura de Serra, que apuesta por una unidad específica contra la discriminación de la mujer “y resolver cada injusticia en el área correspondiente”.
La igualdad en su contexto más amplio, tanto de género como social, frente a reforzar las políticas contra la discriminación de la mujer y situar cada “injusticia” en el lugar que le corresponde. Son las dos visiones divergentes de los candidatos en las elecciones a rector de la Universidad de las Palmas de Gran Canaria que se celebrarán el 25 de este mes, sobre el área de igualdad.
“Tenemos que ir al fondo de los problemas de discriminación de la mujer, no nos podemos quedar en el lenguaje inclusivo. En la Universidad hay 99 catedráticos varones y 30 mujeres, ¿por qué ocurre esto después de 30 años? Ese es el fondo de la cuestión”, indicó la catedrática Beatriz González López-Valcárcel, que en estos momentos coordina el plan de igualdad de la candidatura de Lluis Serra, que incorpora en el área del rector las competencias de igualdad, sostenibilidad y acción institucional, salud y bienestar, como ejes transversales al conjunto de la universidad y que marcan en sí mismos algunos de los objetivos que definen su propuesta: la consecución de una universidad equilibrada, igualitaria, sostenible y saludable.
99 hombres y 30 mujeres conforma la actual plantilla de catedráticos en la ULPGC
“La solución no es meter todas las desigualdades e injusticias en un mismo paraguas de igualdad, porque eso desvirtúa el problema para el que se creó la unidad de igualdad, que es la discriminación de la mujer, incluso la palabra mujer ha desaparecido. Vamos a volver a decir la palabra mujer, que somos la mitad de la humanidad, y vamos a recentrar el tema”. Beatriz González señala como ejemplo, que la desigualdad en el acceso a la universidad de los estudiantes, es un problema “muy serio” que hay que afrontar, pero como área transversal desde Alumnado, con el Consejo Social, becas... no en la Unidad de Igualdad. “Nos hemos quedado tapadas por el aluvión de cosas que nos han echado encima. Las injusticias tienen que estar resueltas en el área que le corresponde, no es buena idea crear un vicerrectorado de injusticias varias”, apunta la catedrática, que propone implementar medidas de discriminación positiva que ayuden a la mujer “en una carrera que está claramente obstaculizada”.
Compromiso social
Una de las novedades que presenta en su programa el candidato a la reelección a rector, Rafael Robaina, es la creación de un vicerrectorado específico para la Igualdad, Diversidad e Inclusión con Ángeles Perera, actual decana de la Facultad de Ciencias de la Educación, al frente. Su objetivo es defender la igualdad de trato sin distinción de géneros, la inclusión de los estudiantes con dificultades de aprendizaje y el desarrollo del compromiso social de la Universidad, todo ello a través del “pensamiento crítico” y del “rigor” del análisis de la realidad.
Beatriz González: “La solución no es meter todas las injusticias en un mismo paraguas”
“El trabajo por la igualdad y por la diversidad no se consigue de un día para otro, aunque no partimos de cero porque ha habido un trabajo previo de muchas compañeras, hay que seguir profundizando y un vicerrectorado con unas personas, estructura y presupuesto dedicado a este tema me parece un avance importante”, apuntó Perera, quien define la iniciativa como “una responsabilidad y un compromiso con la sociedad”.
La formación y la investigación son la base sobre la que se sostienen las acciones planteadas por este vicerrectorado, tales como la creación de un plan de formación en distintos ámbitos para el alumnado y el profesorado, “que oriente hacia la igualdad de género, pero que también desarrolle la fórmula de compromiso social, y de análisis de la realidad, que nos preocupa mucho”, apuntó Perera.
Ángeles Perera: “Vamos a impulsar la investigación y el análisis riguroso de la realidad”
También proponen crear grupos científicos y dotarlos de una estructura, para impulsar la investigación y el análisis de la realidad; así como adecuar a “la realidad cambiante” el plan de igualdad y el protocolo de acoso de la ULPGC. “Hay que revisarlo e implantar medidas para que calen de verdad en los campus, en las aulas”. Asimismo, añade la necesidad de establecer comisiones de trabajo con otros agentes externos a la Universidad, como por ejemplo la Consejería de Educación, que trabaja en el despertar de las vocaciones científicas en las estudiantes, en acciones de igualdad, el respeto a la diversidad...
“Pero queremos ir más allá de la igualdad de género e impulsar un plan de acción solidaria y de acogida para el alumnado con distintos tipos de dificultades, que de verdad se sientan acogidos y orientados en su futuro que pasa por la educación superior”, concluyó Ángeles Perera.
Propuestas para un nuevo vicerrectorado
- Objetivos: El Vicerrectorado de Igualdad, Diversidad e Inclusión que propone la candidatura de Rafael Robaina, contempla entre sus objetivos, promover el pensamiento crítico y el análisis de la realidad; fomentar el compromiso social de los miembros de la Universidad desde el área de trabajo específica de cada cual; orientar a los estudiantes sobre su itinerario vital y, de forma individualizada, a aquellos/as con necesidades educativas especiales; establecer un plan de formación en diversos ámbitos de la igualdad; impulsar la investigación en igualdad, diversidad y lucha contra la pobreza; y planificar actividades e iniciativas que trabajen la igualdad, la inclusión y la justicia social.
- Acciones formativas: Incluir en los proyectos docentes de algunas asignaturas temas relacionados con los derechos humanos, la pobreza, la igualdad y el análisis de la realidad social de Canarias; impulsar proyectos conjuntos con profesorado de distintas disciplinas; y organizar un plan de formación sobre análisis de la realidad y promoción del voluntariado en coordinación con el Consejo de Estudiantes, entre otras.
- Inclusión: Mejorar los procedimientos de apoyo a estudiantes de nuevo ingreso con necesidades educativas especiales; fomentar entre la comunidad universitaria un entendimiento de la diversidad como norma y no como excepción, que permita ir hacia una Universidad inclusiva generadora de un entorno cada vez más seguro y sin etiquetas; dar respuesta a la diversidad de estudiantes atendiendo a sus diferencias y características personales, garantizando el apoyo necesario para que todo el estudiantado con necesidades educativas específicas pueda normalizar sus estudios en igualdad de condiciones que el resto de sus compañeros y compañeras.
- Espacio seguro: Impulsar un Plan de Acción Solidaria y Acogida; mantener y mejorar el protocolo de actuación y acogida de personas, atendiendo las necesidades de los estudiantes refugiados; activar un plan de atención educativa a estudiantes inmigrantes; garantizar la igualdad de oportunidades, fomentando un entorno de no discriminación e igualdad, independientemente de razones de nacimiento, raza, sexo, religión u opinión.
