El Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín, centro dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, a través de los servicios de Cirugía General y Radiología, miembros de la Unidad de Mama, incorpora la implantación de semillas ferromagnéticas para localizar ganglios que se encuentran afectados por un tumor. De esta forma, se pueden extirpar selectivamente solo esos ganglios evitando realizar la extirpación de todos los ganglios de la axila. La utilización de esta técnica, que se realiza después de administrar quimioterapia, permite ser más conservador y preciso en el tratamiento quirúrgico del cáncer de mama. Además, el objetivo es utilizarla, en un futuro cercano, para la localización y extirpación de tumores mamarios que no son palpables.

Se trata de una técnica novedosa que se está comenzando a realizar en varios hospitales españoles. El Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín ya la ha incorporado, siendo el primer hospital canario en realizarla. En estos momentos, tal y como aseguran los expertos, existen evidencias que demuestran que se pueden preservar los ganglios tras la quimioterapia en determinadas pacientes que han respondido al tratamiento, evitando las temidas complicaciones de la linfadenectomía axilar y la radioterapia, siendo una de ellas, y quizá la más conocida, el linfedema (hinchazón del miembro superior). Esta complicación puede implicar una importante limitación funcional y riesgo de infección.

La Unidad de Mama del centro hospitalario lleva realizando la extirpación de los ganglios afectados por el tumor desde el año 2017. No obstante, para localizar estos ganglios era necesario colocar, antes de administrar quimioterapia, un clip de metal. Después de la quimioterapia, y como paso previo a la cirugía, se incorporaba una guía de metal (llamada arpón) en la axila de la paciente para poder localizar los ganglios en quirófano. El arpón es una especie de alambre largo cuya punta tiene forma de paraguas y se ancla en el tejido, en este caso, el ganglio. Tradicionalmente se ha usado para localizar tumores que no se palpan en la mama. Aunque los resultados obtenidos a través de esta técnica son buenos, encierra cierta dificultad y posibles complicaciones. Además, resulta incómoda para la paciente.

Avance

Por este motivo, la utilización de las semillas ferromagnéticas supone un avance importante para las pacientes y una mejora de la calidad asistencial. La semilla ferromagnética (Magseed®-Sysmex) es un pequeño trozo de acero inoxidable de aproximadamente cinco milímetros de largo y un milímetro de ancho, que se introduce en el ganglio o tejido mamario de la paciente mediante unas agujas que la llevan incorporada; semejantes a las que se usan para hacer una biopsia. Las semillas son inocuas y pueden permanecer de forma indeterminada en el cuerpo de la paciente.

Por otra parte, no pierden eficacia porque se detectan de la misma forma meses después de su colocación y no migran. Incluso, no es preciso que la paciente se quede ingresada después de su colocación. Una vez la paciente está en quirófano, se dispone de un sistema de detección específico (Sentimag®-Sysmex), compuesto de un detector y de una sonda, que cuando está cercano a la semilla genera un campo electromagnético detectable mediante la sonda, más o menos potente según la cercanía a la semilla. Esto aporta su localización y, consecuentemente, permite extirpar el tejido que la contiene (ganglio linfático o tumor de mama).

Cáncer más frecuente

El cáncer de mama es la neoplasia más frecuente en la mujer. En el Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín se intervienen por este motivo, aproximadamente, 350 pacientes al año. La mayoría de estas pacientes son sometidas a una cirugía conservadora, preservando la mama y los ganglios de la axila, ya que se ha demostrado que con este tratamiento se consiguen excelentes resultados oncológicos y menores secuelas físicas, funcionales, psicológicas y estéticas.