El número de personas que teletrabajan en España al menos de manera ocasional alcanzó a finales de 2020, el año del Covid, la cifra récord de 2,86 millones, un 74,2% más que a cierre de 2019, lo que supone un aumento en valores absolutos de más de millón de trabajadores respecto a las cifras del año anterior, según un estudio de Adecco a partir de datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).

De esta forma, el volumen de empleados que trabajaban a distancia a cierre del año pasado se situó en el 14,5% del total de ocupados, frente al 7,9% de 2019, cuando sólo algo más de 1,5 millones de personas teletrabajaban en España al menos ocasionalmente, la mayoría en las comunidades autónomas de Galicia, Extremadura, Cataluña y Baleares.

Con la irrupción de la pandemia y la llegada del confinamiento domiciliario, el total de personas que trabajan al menos ocasionalmente desde su hogar se multiplicó por más de dos, superando los 3,5 millones de personas, récord absoluto. Desde entonces, con la desescalada y la 'nueva normalidad', el total de teletrabajadores se ha ido moderando hasta alcanzar a cierre de 2020 los 2,86 millones de personas, el 14,5% del total de ocupados.

No obstante, el informe subraya que, pese a la significativa expansión del teletrabajo a lo largo de los últimos meses, esta modalidad laboral en España aún está por detrás de la mayoría de los países de su entorno. Así, mientras la proporción de teletrabajadores dentro del total de ocupados alcanza en España el 14,5%, la media de la Unión Europea se sitúa en el 21,5%.

Entre los países europeos, Suecia y Holanda encabezan la clasificación, pues tienen a más del 40% de sus ocupados trabajando a distancia. Les siguen, con más del 35%, Luxemburgo (37,5%) y Finlandia (33,5%). En los países vecinos, la proporción de teletrabajadores también es superior a la española, con Francia en una tasa del 28,3%, y Portugal, con una tasa del 20,7%. Sólo Italia cuenta con una proporción menor de teletrabajadores que España (9,8%).

Madrid y Cataluña, las que más crecen

Según el informe, la evolución del trabajo a distancia ha tenido un comportamiento dispar por comunidades, pese a que todas lo han incrementado respecto a 2019. La Comunidad de Madrid y Cataluña han multiplicado en un año por más de dos su cifra de teletrabajadores. De hecho, en Madrid se ha triplicado. En cambio, Aragón, Extremadura y la Comunidad Valenciana presentan incrementos inferiores al 20%.

De este modo, la presencia del teletrabajo se ha concentrado en Madrid y Cataluña, que han pasado de tener un tercio del total de teletrabajadores del país a la mitad. Si se suman Andalucía y la Comunidad Valenciana, estas cuatro autonomías han pasado de tener el 60% del total de teletrabajadores al 70%.

El informe revela además que casi uno de cada cuatro puestos de trabajo suprimidos durante la pandemia eran a jornada parcial. La proporción de ocupados a tiempo parcial en el total de trabajadores ha caído hasta el 14%, seis décimas menos que hace un año y su menor tasa desde junio de 2012.