Viajes que se cancelan a última hora, medidas que varían según cada país y de un día para otro, el riesgo de quedarse atrapado en una ola de contagios, las exigencias de pruebas y cuarentenas, el mismo miedo a contagiarse… La pandemia y las severas restricciones en todo el mundo –incluyendo el confinamiento de poblaciones enteras y el cierre parcial o total de fronteras– han dejado en tierra a la inmensa mayoría de viajeros. Y el horizonte no termina de despejarse, mientras las autoridades sanitarias aconsejan quedarse en los lugares de residencia o hacer escapadas cortas mientras las campañas de vacunación avanzan. Un solo dato explica la dificultad de encontrar destinos accesibles al año de que se decretara el confinamiento en España: solo 25 de los 194 países que hay en el mundo han eliminado las restricciones para entrar en su territorio.
La frustración por no poder volar la conocen muy bien tres de los canarios que más kilómetros llevan a sus espaldas: Juan Diego Amador, primer canario que coronó el Everest, y Fernando Palarea y César Sar, que han dado la vuelta al mundo. Los tres recuerdan con nostalgia los momentos en los que cualquier lugar del globo estaba al alcance. Poco a poco algunos países empiezan a abrir sus fronteras, dada la importancia del turismo en sus economías y la mejora de los indicadores de la covid-19. Pero la incertidumbre sigue marcando la pauta.
Dos vueltas al mundo
De los tres viajeros consultados, solo uno se ha lanzado a la aventura, respetando escrupulosamente las medidas eso sí. Desde que en junio de 2020 empezaron a flexibilizarse las restricciones, César Sar ha viajado a Francia, Portugal, Ucrania, Chile, Finlandia, Egipto, Barcelona, Madrid, Salamanca y todas las islas canarias menos La Graciosa. Sar, con dos vueltas al mundo y más de 100 países en sus pasaportes, asegura que se puede hacer turismo internacional, pero a destinos donde se permita la entrada a los españoles, respetando las medidas e incluso adoptando otras no exigidas. “Es vital informarse bien, llevar un buen seguro sanitario y respetar las normas de cada país”, explica, para precisar los muchos inconvenientes y pocas ventajas de volar en estos tiempos de pandemia: “La mayor ventaja es que los hoteles que siguen abiertos han rebajado sus precios y acudes a sitios donde suele haber masificaciones que ahora han desaparecido. Los inconvenientes, por contra, son muchos: dificultad de encontrar vuelos, necesidad de hacerte pruebas –yo llevo ya 23–, la reducción de actividades... Eso sí, ninguno de los países a los que fui cerró los lugares que quería visitar”.
La crisis sanitaria ha abierto un catálogo de protocolos amplio adaptado a donde se quiera ir
Los cuatro destinos que acaparan hoy el interés de los pocos que se arriesgan a hacer las maletas, por las facilidades de entrada en comparación con los cierres generalizados –parciales o totales– de fronteras, son Costa Rica, México, Egipto y Turquía. Aunque la opción más responsable y segura sea la de evitar los viajes mientras dure la pandemia, en estos lugares los viajeros podrán encontrar una baja incidencia de casos e infraestructuras turísticas y sanitarias robustas para garantizar que si dan el paso, no sea al vacío. La gran mayoría de destinos típicos para la Semana Santa se han quedado fuera de la ecuación al exigir no solo PCR, incluso en más de una ocasión, sino cuarentenas.
Uno de los destinos elegidos por los pocos que se atreven a irse de aventura es Egipto. Famoso por surgir de una de las civilizaciones más atrayentes de la humanidad, debido al parón del turismo mundial lo que antes era un foco de aglomeraciones masivas ahora es un desierto. En palabras del protagonista de la serie El Turista 1 y 2, César Sar, “pude disfrutar de las Pirámides sin aglomeraciones, lo cual habría sido imposible sin pandemia”. El requisito principal para poder acceder al país de Tutankamón es presentar a la entrada una prueba PCR negativa realizada 72 horas antes del vuelo.
Pero por encima del turismo internacional está el Archipiélago. Más allá de las ventajas sanitarias, se trata de una opción más económica y que favorece al sector turístico local, sumido en la mayor crisis de su historia. El único alpinista canario que ha coronado el Everest y licenciado en Geografía, Juan Diego Amador, asegura que ha visitado muchas veces cada una de las ocho Islas “y cada vez que repito conozco algún lugar nuevo y tan fascinante como los visitados”.
Darse una escapada por Canarias es la mejor opción, con diferencia. Además, según César Sar, hay un amplio abanico de posibilidades. “Desde un ambiente desértico, como las dunas de Maspalomas de Gran Canaria, a un bosque encantado, como el Parque Nacional de Garajonay de La Gomera, o islas-continente como El Hierro, donde hay un poco de todo, con prados verdes y vacas pastando, lugares donde parece que están en Suiza, Holanda o Irlanda”. “Canarias es un pequeño universo y tenemos que creérnoslo”, remarca.
Costa Rica, Egipto, Turquía o México son destinos preferidos de los que arriesgan
Con parques nacionales como el del Teide, Tenerife se convierte en un destino muy atractivo y completo para los residentes isleños, también por una planta hotelera de gran calidad. “Lamentablemente hay canarios que han visitado el Teide una vez en su vida o ninguna”, lamenta el periodista especializado en viajes Fernando Palarea. “Esta sería una buena oportunidad de hacerlo”, apostilla.
Tanto si es el norte de África, en el Caribe o en las playas de Jandía, las recomendaciones son claras. “Debemos ser responsables”, enfatiza Juan Diego Amador. César Sar recomienda precaución y protección: “Hay lugares donde no es obligatoria la mascarilla, por ejemplo Ucrania o Finlandia, pero recomiendo que aún así se use. Yo lo hice”. Palarea, refiriéndose a los viajes, cree que “deben quedar en un plano secundario hasta que la situación mejore”. “Es tiempo de cuidarnos y de seguir todos los protocolos sanitarios. Ya habrá tiempo de viajar cuando la situación mejora en todo el mundo. Soy el primero que lo echa de menos”, asegura este periodista y viajero empedernido que ha estado en un centenar de países de los cinco continentes.
Pruebas, seguros sanitarios...
Pero hay quienes no pueden esperar más. Tienen que ser conscientes, eso sí, de que las exigencias son máximas y los problemas pueden ser múltiples: pruebas, seguros sanitarios específicos para la covid, la posibilidad de que una ola repentina los pueda dejar bloqueados... Costa Rica es uno de los destinos más laxos a la hora de acceder a su territorio –en la actualidad no pide una prueba PCR– salvo por una pega: es imprescindible contratar un seguro con una cobertura superior a los 50.000 euros. Esta póliza garantiza la atención sanitaria ante todo tipo de casos pero sobre todo ante cualquier atención relacionada con el coronavirus.
La gran ventaja de Costa Rica, que lo ha convertido en uno de los destinos preferidos para los pocos que están dispuestos a arriesgarse, es que la mayoría de las actividades que ofrece se desarrollan en plena naturaleza, al aire libre, donde el riesgo a la hora de contagiarse es mucho menor. Posee además un sistema sanitario sólido, así como una baja incidencia de contagios por cada 100.000 habitantes que se ha mantenido constante: 78,15. Esto hace menos probable un repunte de casos que pueda ocasionar el cierre de los aeropuertos.
“Soy el primero que echa de menos volar pero es tiempo de cuidarse”, afirma Palarea
Otro de esos países con menos restricciones es Turquía. Hoy se puede entrar sin PCR ni aislamiento. El Consulado de España, sin embargo, desaconseja la entrada al estado otomano salvo que sea estrictamente necesario debido a un repunte de casos que crece entre sus ciudadanos. “Si alguien se lanza a un viaje, tiene que consultar la información de forma constante. Las cosas pueden cambiar de un momento a otro”, concluye César Sar.
Las medidas más importantes
25 países sin restricción
- De los 194 países que hay en el mundo, solo 25 permiten la entrada sin restricción. Entre ellos se encuentran Costa Rica, México, Brasil, República Dominicana, Tanzania o Sudáfrica. El resto tienen cierres parciales o totales de sus fronteras. La situación puede cambiar en cualquier momento.
PCR 72 horas antes
- Una de las principales medidas que imperan en cualquier aeropuerto internacional con alguna restricción es llevar una prueba negativa con 3 días de validez.
Seguro médico
- Una de las exigencias más repetidas en los países que permiten la entrada de turistas en la contratación de un seguro sanitario para la covid con una cobertura de al menos 50.000 euros.
Mantenerse informado
- La medida más efectiva para no fallar con el destino es estar al día de los informes oficiales y reservar los vuelos con la menor antelación posible para evitar cancelaciones.
Uso de mascarilla
- Aunque en algunos lugares no sea obligatorio su uso, las autoridades sanitarias recomiendan no dejar de usarlas para prevenir contagios.
Elegir lugares cercanos
- Al no haber forma de predecir un repunte de casos que pueda cerrar los aeropuertos sin dejar margen de maniobra, se recomienda elegir destinos próximos y accesibles.
