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Análisis

Centenario del servicio de Urología creado por el Cabildo de Gran Canaria

Su nacimiento de la mano del doctor José Ponce Arias constituyó un nuevo hito en la historia de la Medicina canaria

En estos días se cumplen los cien años de un nuevo hito en la historia de la medicina canaria. Nos estamos refiriendo a la creación por el Cabildo de Gran Canaria de un servicio de urología, entonces conocido como de vías urinarias. La Urología es una especialidad medico quirúrgica que se remonta a la segunda mitad del siglo XIX como una subespecialidad de la Cirugía General. Esta separación se debió fundamentalmente a tres factores: la creación del cistoscopio, el tratamiento especializado de la litiasis urinaria y la creación de unidades monográficas en los hospitales.

A partir de 1896 se acepta la palabra “urología” como ciencia médica de los problemas de aparato urinario cuando se funda la Asociación francesa de Urología. En ella se destacaron los grandes maestros de esta especialidad que consiguieron su expansión y creación de nuevas sociedades y de cátedras en el viejo y nuevo continente. Así la Asociación Española de Urología se funda en 1910 y la primera cátedra de esta especialidad se crea en España en 1920.

Formado en medicina en la Universidad de Montpellier, el doctor José Ponce Arias (1893 – 1979) regresa a su isla natal a comienzos de los años veinte del siglo pasado. Convencido de que su especialidad, en la que se había formado con el profesor Jeanbrau, era eminentemente hospitalaria nada más llegar intenta que en el único hospital público existente en Las Palmas, el hospital de San Martín, se le autorice a tratar enfermos de su especialidad.

Para ello presenta en el Cabildo de Gran Canaria, propietario de dicho centro, una instancia el 11 de marzo de 1921. En ella y para eludir posibles obstáculos, indica que desea aplicar sus servicios profesionales al tratamiento de la enfermedad de los riñones y vías urinarias estando dispuesto a hacerlo, así como facilitar el instrumental quirúrgico de su propiedad y a título gratuito. Visto el informe favorable del Decano del Cuerpo Médico de la Beneficencia Insular la Comisión Permanente del Cabildo acuerda el 31 de marzo nombrarlo para prestar los servicios solicitados, en las condiciones señaladas, haciéndose cargo unas semanas después. Con ello se crea el primer servicio de Urología en Canarias, necesitando pasar más de veinte y cinco años hasta que hubiera otro similar en el hospital Civil o de los Desamparados en Santa Cruz de Tenerife.

En la época en que se crea el servicio de Urología en Las Palmas existían otros, desde finales del XIX, en varios centros hospitalarios de Madrid y Barcelona y unos pocos desde comienzos del siglo XX en algunas capitales de provincia como Valencia, Bilbao, Oviedo, Cádiz, Santiago, San Sebastián y Murcia. Pocos años después, debido a la progresiva actividad desarrollada, el Cabildo acepta crear una ayudantía en el Servicio de Urología del Hospital de San Martín. Por ejemplo, en 1941 se registran más de 100 enfermos ingresados y 75 intervenciones quirúrgicas solo de pacientes de Beneficencia.

Centenario del servicio de Urología creado por el Cabildo de Gran Canaria

Hasta 1963, año en el que se jubila por cumplir los setenta años, permaneció el doctor Ponce Arias ejerciendo en el Hospital de San Martín. Sus sucesores continuaron la labor asistencial desde 1971 en el Hospital Insular de Gran Canaria, donde permanece en la actualidad, al cerrar sus puertas el viejo caserón de Vegueta.

En los cien años de vida, la reestructuración de la Sanidad Pública y la creación de la Seguridad Social con el consiguiente aumento de la demanda asistencial, el servicio de Urología ha tenido que ampliar la plantilla de profesionales, llegando en la actualidad a contar con más de una docena entre facultativos especialistas y médicos residentes.

Nunca pudo soñar el doctor Ponce, cuando con 27 años recibe la autorización del Cabildo para fundar ese servicio, que la especialidad progresase de tal modo que hoy en la época de la litotricia, los trasplantes renales, la cirugía robótica, etc., estos avances le parecerían ciencia ficción.

No es lugar para explayarnos en la biografía del doctor Ponce, pionero de la Urología canaria, pero solo cabe mencionar dos apuntes más: fue nombrado en 1974 Miembro de Honor de la Asociación Española de Urología, y el doctor Pérez Albacete lo incluye en su libro titulado Cien figuras de la Urología española.

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