La revista "National Geographic" dedica en junio la portada de su edición española a los últimos descubrimientos sobre el origen de los antiguos pobladores de Canarias, con un amplio reportaje firmado por la escritora Emma Lira, autora de la novela "Búscame donde nacen los dragos".

Desde la fascinación que siempre han provocado en toda Europa las llamadas momias guanches, por su prodigiosa conservación, todo un "pacto con la eternidad", en palabras de la autora, la revista se adentra en el estado de las investigaciones sobre quiénes eran los antiguos pobladores de las islas, de dónde llegaron y cuándo.

El reportaje parte del descubrimiento en el siglo XVIII de la mítica cueva de "las mil momias" en el barranco de Herques (Tenerife), cuya ubicación sigue siendo un misterio a día de hoy, pero de la que se sabe que procede el "xaxo" -el nombre que daban los antiguos canarios a los cuerpos- mejor conservado de cuantos se conocen: el que se exhibe en el Museo Arqueológico Nacional.

Con el apoyo de la egiptóloga e historiadora Milagros Álvarez Sosa, la revista examina los detalles de cómo se preparaban de los cadáveres para la eternidad en sociedad aborigen canaria, la técnica del "mirlado", que consiguió resultados asombrosos, superiores incluso al proceso de momificación del antiguo Egipto.

También recorre los exámenes que se han hecho con técnicas del siglo XXI, como tomografías computerizadas, análisis de ADN o investigaciones forenses, a las momias del Museo Arqueológico Nacional, el Museo Canario o el Museo de Naturaleza y Arqueología de Tenerife para seguir arrancándoles secretos sobre cómo era la vida en las sociedades prehispánicas de las que proceden.

El reportaje describe además el cambio que se ha producido en los últimos años en la arqueología canaria, que ha dejado de considerar todo el pasado de las islas previo a la Conquista del siglo XV como una fotografía plana y estática, para contemplarlo como un largo recorrido de unos 2.000 años en los que las sociedades que habitaban las islas fueron cambiando y evolucionando de forma distinta.

Es algo que explican para la revista la conservadora del Museo Canario, Teresa Delgado, y la investigadora las universidades de La Laguna y Stanford Rosa Fregel, autora de nuevos descubrimientos sobre el linaje genético de los antiguos canarios que confirman ya casi definitivamente que descendían de los pueblos bereberes, o amazigh, del norte de África.

El trabajo no esquiva la parte más abierta de todo ese pasado, el debate científico abierto sobre cuándo llegaron los primeros pobladores de Canarias a las islas, si cuando dicen las dataciones de Carbono 14 más fiables (todas correspondientes a los primeros siglos después de Cristo) o bastante antes, en tiempos previos dentro del contexto del Imperio Romano.