El multimillonario John David McAfee, creador del famoso antivirus que lleva su nombre, ha alegado este martes ante la Audiencia Nacional ser un perseguido político de Estados Unidos por sus denuncias contra la "corrupción" de la agencia tributaria de ese país para frenar su extradición.

En la vista que se ha celebrado esta mañana ante la Sección Segunda de la Sala de lo Penal, la Fiscalía española ha reprochado la versión del empresario y ha pedido su entrega por tres delitos fiscales relativos a los ejercicios de 2016, 2017 y 2018.

McAfee, que ha prestado declaración desde prisión, ha insistido en que los cargos que se presentan en su contra son "puramente políticos" y ha pedido al tribunal "que sea capaz de ver la injusticia de todo esto". "En caso de ser extraditado es casi seguro de que pasaré el resto de mi vida en prisión porque Estados Unidos quiere usarme como un ejemplo", ha dicho.

El empresario ha asegurado haber pagado "millones de dólares en impuestos" mientras estuvo al frente de sus compañías, cuando --según ha dicho-- descubrió que "había muchísima corrupción en la agencia tributaria de Estados Unidos".

En el marco de su defensa, ha remarcado que tras aquel descubrimiento vendió su empresa y se dedicó a la política porque consideró que era la manera de "expulsar la corrupción" de la Hacienda estadounidense. Ha explicado al tribunal que se unió al partido libertario y que se presentó como candidato a la presidencia de Estados Unidos con la promesa de "publicar y sacar a la luz la corrupción de la agencia tributaria" estadounidense.

"Pretendida militancia"

Desde el Ministerio Público han desestimado los argumentos de McAfee y han advertido al tribunal de que el multimillonario ha alardeado de una candidatura que no llegó a ser apoyada por el partido y que ha exagerado "conscientemente" una "pretendida militancia política". "Es un millonario que no quiere pagar impuesto y en determinada circunstancia eso es delito", ha zanjado el fiscal.

Su defensa ha insistido en que se trata de "un tema político" y que "lo único que pretende" Estados Unidos es "convertirlo en un chivo expiatorio" para quien quiera seguir su pauta. El letrado ha asegurado que McAfee es "un genio adelantado a su tiempo" que ha creado un sistema monetario que ataca al sistema vigente, en referencia al negocio de criptomonedas que tiene. "Es el enemigo público número 1", ha asegurado.

Además, ha presentado una queja a la Sala porque considera que "no se han respetado los derechos" de McAfee como ciudadano británico --posee doble nacionalidad-- y ha insistido en que Reino Unido debía haber sido notificado para que pudiera ser juzgado allí.

En el marco de su exposición, la defensa también ha criticado que pese a la "situación de enfermedad crónica" y la avanzada edad del empresario --tiene 76 años-- aún no se le haya vacunado. Ha suplicado e implorado "clemencia" a la Sala "para que el tiempo que le queda a McAfee en España lo pueda pasar en libertad". "Existe un catálogo de medidas alternativas que no se ha tenido en consideración y entendemos que tratándose de una figura mundial se tenga a bien acceder a esta petición", ha señalado.

Ocho meses en prisión

El multimillonario fue detenido el pasado 3 de octubre en virtud de una orden internacional de detención emitida por la Corte Federal del Distrito de Tennesee. Tras comparecer ante el que era entonces titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, José de la Mata, se decretó prisión provisional.

Estados Unidos reclamó su extradición en noviembre y el Consejo de Ministros acordó continuar con el expediente por la vía judicial. En enero McAfee se negó a ser entregado.

La justicia del país norteamericano le persigue por cinco delitos graves de evasión de impuestos que acarrean pena de cárcel no más de cinco años por ejercicio, y otros cinco delitos menores por la omisión de presentación de la declaración.

Según el fundamento de la solicitud de extradición, en 2014 el empresario tuvo ingresos por charlas y eventos por valor de 90.000 dólares y no solo no hizo la declaración sino que sus ganancias las transfirió a una tercera persona para no aparecer como beneficiario y compró un inmueble que puso también a nombre de otra persona.

En 2015 obtuvo unas ganancias de 100.000 dólares por charlas y por cesión de derechos para contar su historia de vida; en 2016 obtuvo 800.000 dólares que le fueron abonados haciendo transferencias a terceras personas; y en 2017 obtuvo fue de 1,25 millones de dólares, gran parte en criptomonedas. Estados Unidos sostiene que como McAfee entendía que esa moneda digital no podía ser rastreada por el fisco porque el pago no fue nominal, hizo abonar esa cantidad en una cartera de Ethereum por medio de diez transferencias y luego lo movió a otras carteras.

El Ministerio Público ha explicado que en España no presentar la declaración no es un delito sino una infracción administrativa y ha acordado pedir su extradición únicamente por los delitos fiscales relativos a los ejercicios de 2016, 2017 y 2018.