La Delegación del Gobierno de Canarias está realizando gestiones para que el buque Ángeles Alvariño, que tiene previsto suspender esta tarde la búsqueda de Tomás Gimeno y de su hija Anna, amplíe unos días más los rastreos en la costa de Tenerife.

Fuentes de la Delegación del Gobierno han informado a Efe de que ya este barco ha ampliado dos veces su estancia a Tenerife tras incorporarse el pasado 30 de mayo a la búsqueda de Tomás y de sus hijas Olivia y Anna, desaparecidas el 27 de abril.

La Delegación del Gobierno en Canarias está realizando gestiones con el objetivo de que el buque oceanográfico 'Ángeles Alvariño' pueda prolongar varios días más las labores de búsqueda de Anna y Tomás Gimeno, según ha anunciado el propio delegado del Gobierno, Anselmo Pestana.

En declaraciones a los medios, el delegado ha indicado que se está viendo si el barco "puede permanecer algunos días más" en la isla, algo que, según precisó, "se decidirá a lo largo de esta tarde y lo anunciarán a quienes corresponde tomar esa decisión".

El 'Ángeles Alvariño' tenía previsto concluir la búsqueda de Anna y Tomás este jueves; sin embargo, esta mañana se dio a conocer que el buque terminaría con los rastreos esta misma tarde, en torno a las 19.00 horas, para sumarse a labores de investigación propias del Instituto Español de Oceanografía (IEO).

Por otro lado, fuentes judiciales han señalado que el buque oceanográfico no necesita una orden judicial para irse, sino solamente haber cumplido con la encomienda dictada por la magistrada que llevaba el caso, que suponía rastrear los puntos en los que la investigación determinaba que había estado el móvil de Tomás Gimeno, pudiendo abandonar esta labor una vez el barco la diera por cumplida.

Fuentes cercanas a la investigación han confirmado a Efe que está previsto que esta tarde a las 19:00 horas el Ángeles Alvariño suspenda la búsqueda y abandone la isla para cumplir otros compromisos que tiene.

Los rastreos realizados por este buque del Instituto Español de Oceanografía permitieron encontrar el pasado jueves 10 de junio el cadáver de la niña Olivia, de 6 años, que se encontraba a mil metros de profundidad en el interior de una bolsa de deporte.

Junto con esa bolsa se encontraba otra vacía en la que se sospecha que pudiera haber estado el cuerpo de Anna, de 1 año.

Tras una parada técnica durante el fin de semana, el barco reinició la búsqueda el lunes sin que se hayan encontrado nuevos indicios sobre los desaparecidos.

Es la primera vez que este buque, que dispone de un sonar y un robot submarino, se dedica a la búsqueda de personas en el mar ya que su principal función son las campañas científicas.

En las últimas horas el barco apura la búsqueda en la zona de Añaza y no en la bocana del puerto de Santa Cruz, donde encontraron el cuerpo de Olivia.