El Congreso ha acogido este jueves un debate en torno a las 40 propuestas de la juventud española que se desprenden del estudio 'El futuro es ahora' y que analiza las opiniones de 13.587 personas entre 16 y 34 años, en lo que constituye una de las mayores investigaciones demoscópicas sobre este colectivo. El estudio, difundido por El Periódico de Catalunya, ha partido de la iniciativa privada y la sociedad civil, en concreto de la empresa PlayGround, en colaboración con la fundación Ashoka, la Universidad ESIC y la plataforma de participación Osoigo. Pero ha sido entregado a la presidenta del Congreso, Meritxelll Batet, y ha sido debatido entre los diputados más jóvenes de la cámara, de diversos partidos, con el objetivo de que las propuestas se transformen en iniciativas políticas.

Para ello, queda un largo camino, dado que algunas demandas llevan años sin resolverse, como acabar con la precariedad laboral, y otras van diametralmente opuestas a la intención del Gobierno, como rebajar la edad de jubilación para fomentar el reemplazo. Si bien, la acogida por parte de los diputados jóvenes ha sido sensible a las reivindicaciones. "Os tendemos la mano", ha señalado Miguel González, del PSOE.

En la presentación de las propuestas han participado diversos jóvenes, como María Caso, de la red Talento para el Futuro, quien ha denunciado que "nunca sea suficiente el número de master o de idiomas" para conseguir un trabajo digno, porque siempre impera "la precariedad". Pero, en su opinion, es hora de usar las propuestas de 'El futuro es ahora' para "repensar el modelo" y demostrar que el Gobierno también trabaja para los 17 millones de personas que tienen menos de 30 años. Este colectivo, según arroja la macroencuesta, se sienten poco o nada representado por los partidos.

Nadie de Vox

Al otro lado les escuchaban Isabel Franco, de Podemos, José Ángel Alonso, del PP, Sara Giménez, de Ciudadanos, Marta Rosique, de ERC y el mencionado Miguel González. El resto de formaciones no han participado por motivos de agenda o porque han declinado. No estaba, por tanto, ningún representante de Vox para escuchar que los jóvenes demandan ilegalizar los partidos que fomentan el odio, así como erradicar estos discursos de las redes sociales. Quizá por ello, el debate ha sido sosegado y un ambiente de receptividad. "Nuestra obligación es legislar mirando a la juventud", ha señalado la parlamentaria del grupo morado, quien ha reconocido que quizá no llegue antes de fin de año la regulación del precio de los alquileres que enfrenta a su partido con su socio de Gobierno y es una de las 40 demandas de la juventud.

Respecto a rebajar la edad de jubilación, la republicana Rosique ha admitido es un tema que causa "debate" en su formación y el popular Alonso ha señalado que se "puede analizar", pero ha incidido en el mantra del PP de que lo primero es "fomentar el empleo". Los demás han pasado de puntillas. Por contra, las propuestas sociales, medioambientales y educativas han tenido una gran acogida.