El volcán en erupción en La Palma ya ha lanzado fuera más material que el Teneguía. María José Blanco, directora del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en Canarias explicó este lunes, tras la reunión del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico (Pevolca), que una estimación primera del volumen de material emitido tanto en coladas como en el cono por el volcán se sitúa en 46,3 millones de metros cúbicos. De esta manera, la erupción ya supera en esa estadística a la del Teneguía en 1971, que emitió 43 millones de metros cúbicos. Y esto era así antes de que este lunes por la tarde el volcán se reactivara con explosiones y emisiones de ríos de lava y otros materiales volcánicos.

De este extremo y de lo sucedido durante la mañana de este lunes con el volcán, que paró sus emisiones durante unas horas, se informó en una rueda de prensa de la evolución de la erupción volcánica en La Palma después de la reunión del Pevolca. Participaron Julio Pérez, portavoz del Gobierno de Canarias; Miguel Ángel Morcuende, director técnico del Pevolca; y María José Blanco.

Además de la cuantificación del material, lo más destacado de este lunes es que el volcán cesó temporalmente su actividad para después volver a soltar lava. Los expertos apuntan que es normal que entre en este tipo de fases de descanso, lo cual no implica que se haya apagado, según subrayaron.

La colada de lava que emerge del volcán de La Palma "es probable" que llegue a la costa, de la que se encuentra a unos 800 o 1.000 metros en línea recta, pero no hay seguridad al respecto, dado que se ha producido una ralentización en la velocidad del material magmático, que bordea la montaña de Todoque.

La colada que ayer bajaba con rapidez por el norte del cono eruptivo y que avanzó sobre Todoque se ha dividido en dos "dedos".

Uno de esos dedos se ha encontrado con una pendiente y es previsible que acabe uniéndose al otro, que se que se mueve hacia el sur de la montaña de Todoque.

Confinamiento

"La colada está muy frenada", ha dicho Morcuende, quien ha precisado que a pesar de ello, continúa el confinamiento de los cuatro núcleos poblacionales de Tazacorte más cercanos al lugar donde previsiblemente la lava caiga al mar, en previsión de alguna eventual emanación de ácido clorhídrico que en todo caso supondría afecciones leves dada la distancia de más de 3,5 kilómetros a que están las casas más próximas. Hay unas 300 personas confinadas en esos núcleo de Tazacorte, y respecto a los evacuados en el conjunto de la Isla, siguen siendo unos 5.600, que se alojan en segundas residencias, casas de amigos y familiares, complejos turísticos y el albergue militar de Breña Baja.

Morcuende ha añadido que tanto la calidad del aire como del agua "sigue siendo buena" y "no hay problema para la salud", más allá de la ceniza que se está depositando sobre el suelo en muchas parte de la isla.

Puede ver la rueda de prensa aquí: