La erupción de La Palma está sometiendo a todo el sistema de Protección Civil de Canarias a una "emergencia nunca antes vista", con un volcán de comportamiento "cambiante", que cada día "mueve ficha" y que no permite que las estrategias que han funcionado un día sirvan para el siguiente.

Son las reflexiones que hace para Efe el director de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria, Federico Grillo, una de las voces más respetadas en el sector, tras la gestión que hizo al frente del operativo que combatió el gran incendio forestal de la isla de 2019, cuando hubo noches que les dijo a los ciudadanos que no había forma de contener el fuego, que solo cabía protegerse. Como sucede ahora en Cumbre Vieja con una fuerza aún mayor, la de un volcán.

Grillo está en estos momentos en La Palma ayudando en un operativo que moviliza a un millar de efectivos de diferentes cuerpos de todas las administraciones. No lo dirige. Solo coordina a los bomberos de Gran Canaria desplazados a la erupción, los que se batieron con la colada de lava que arrasó Todoque, a sabiendas de que iban a perder.

"Esta erupción está poniendo de manifiesto muchas cosas -apunta. Por un lado, la solidaridad; por otro, la coordinación de tantos medios; y sobre todo, la entrada de un colectivo con el que no estamos acostumbrados a trabajar, los científicos. No es que sea extraordinaria, es una emergencia nunca vista para un operativo".

"Supera los límites"

Grillo tiene bien presente que solo hace diez años que Canarias se enfrentó a otra erupción, la de El Hierro, pero subraya que aquella fue submarina, con un impacto mucho menor. Lo que está pasando en La Palma, dice, "supera los límites de todo operativo", es "un destrozo enorme", que no había presenciado ni cuando se llevó a algunos de sus equipos a formarse en la erupción de 2014 en Fogo, Cabo Verde.

"Además, sobre el terreno hay muchos efectivos que tienen vinculación con la propiedad, compañeros que han perdido viviendas ellos o sus familiares. Supone un grado de estrés importante para el sistema de Protección Civil y para la propia intervención", añade.

Catorce días después de haber comenzado la erupción, Grillo defiende que el trabajo de los equipos de emergencia merece como poco un aprobado, porque no hay ni una víctima que lamentar ante un fenómeno natural que desborda toda capacidad de reacción y que hizo que la isla entera, literalmente, "entrara en shock", recuerda.

"Hemos ido tomando medidas frente a los diferentes riesgos, gases, lluvia de cenizas, caída de piroclastos, movimientos de la colada... Pero este volcán se caracteriza porque es cambiante, no tiene un comportamiento continuo que te permita que lo de ayer te valga hoy. Lo de ayer cambia y tienes que reorganizar todas tus fuerzas, generar nuevos planes de operaciones", explica.

Y todo cambia tanto y tan rápido, enfatiza, que "a nivel de Protección Civil, de emergencias, todavía no podemos decir que hemos entrado en una situación tranquila, que sabemos lo que tenemos que hacer, porque cuando estás más o menos tranquilo, aparece una nueva boca, la colada sale más líquida, comienza una fase explosiva o entras en un periodo de emisión de gases".

"Es un continuo, como un tablero de ajedrez. El volcán mueve ficha, tú mueves ficha; él te come tres piezas y tú tienes que replantearte otra vez la estrategia", señala.

Federico Grillo reconoce que cada día teme sufrir alguna víctima ente los efectivos de emergencia o entre la población, porque los riesgos son diferentes, aunque siempre intentan anticiparse.

El jefe de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria no duda de que el sistema entero aprenderá de la experiencia de estas semanas en La Palma, pero también es realista: "Es cierto que Canarias debe pensar en que tendrá en algún momento una erupción, pero ¿cómo se entrena a los equipos para situaciones que se dan una vez cada 50 años o más?".

"Ningún operativo puede estar 50 años preparándose. La emergencia puede llegar cuando toda la gente que has entrenado ya se ha jubilado. Quieras o no, esta es una emergencia que no depende de la capacidad de organización frente a un volcán, sino en general, de respuesta de Protección Civil y de emergencias", defiende.