La Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias, a través de la empresa pública Gestión del Medio Rural (GMR), está rastreando fincas baldías en La Palma que poder ofrecer a los propietarios de cultivos de plataneras arrasados por el volcán en Cumbre Vieja.

En el Valle de Aridane hay 102 propietarios cuyas fincas han desaparecido bajo las coladas. Si se añaden las afectadas por la ceniza, la cifra asciende hasta los 1.246 afectados, y si se suman los municipios de Fuencaliente y Tijarafe, el número total de afectados asciende a 3.061.

De la labor de búsqueda de fincas en desuso se encarga un equipo formado por cinco técnicos que están cribando qué parcelas hay disponibles y cuál es su titularidad, si privada o pública.

En el caso de que sean públicas, el real decreto 20/21 del 5 de octubre, de medidas urgentes para la reconstrucción de La Palma, abre la posibilidad de una permuta por las fincas que desaparecieron bajo las coladas.

Luego hay otros condicionantes, como una posible afección por estar en zona protegida o si los terrenos son aptos o no para el cultivo del plátano, ya que se trata de una fruta subtropical que no se da ni en zonas de medianías ni donde hace frío, explica a Efe Augusto Jesús Hernández, director general de Agricultura.

La zona del Valle de Aridane es "perfecta" por su climatología para el cultivo del plátano, apunta Hernández. De hecho, está considerada como la mejor zona de producción de Canarias, pero la búsqueda de fincas en desuso abarca a toda la isla de La Palma.

Así cayó la nueva colada del volcán de La Palma sobre las plataneras antes de llegar al mar

Así cayó la nueva colada del volcán de La Palma sobre las plataneras antes de llegar al mar La Provincia

Hernández señala que este trabajo está aún en "una fase muy embrionaria" y que los mapas de cultivo que aporta la empresa pública Grafcan permiten tener "trabajo adelantado" en cuanto a que ya están censadas las parcelas en uso, las cuales se desecharán, al igual que las que estén "muy al norte" o en zonas de frío.

Calcula que en el plazo de un mes podría haber una estimación inicial sobre las parcelas que se puedan ofertar a los afectados.

Una vez concluya este trabajo de campo, o al menos esté más madurado, se dará a conocer qué alternativas tienen los posibles beneficiarios, entre los que tendrán prioridad quienes "lo han perdido todo, vivienda y modo de vida".

"Queremos ofrecerles la opción de empezar de nuevo en otras zonas, para que no pierdan la esperanza totalmente", apunta el director general de Agricultura.

Además de terrenos, el Gobierno de Canarias confía en que Bruselas valide su propuesta de mantener los históricos de referencia de las fincas afectadas por la lava, así como las perjudicadas por la pérdida de producción a causa de la ceniza, para que no disminuya su cantidad de referencia.

En este sentido, y dada la situación de crisis en el sector, Canarias considera necesario eximir de la obligación de comercializar el 70% de su cantidad de referencia a los productores de las zonas afectadas, tal y como refleja el POSEI, lo que permitiría abonar el cien por cien de la ayuda.

Hernández confía en que la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Unión Europea dará su visto bueno porque "son susceptibles y muy sensibles" a la magnitud de la catástrofe generada por la erupción del volcán de La Palma.