La reconstrucción tras el Covid-19 pasa por un «compromiso social» donde todos los agentes remen en la dirección marcada por la Unión Europea, de la solidaridad, la ocupación de calidad y la sostenibilidad. Así lo afirma Ángel Simón, presidente del grupo empresarial Agbar al que pertenece Canaragua, compañía del sector del medioambiente que gestiona todos los procesos relacionados con el ciclo integral del agua en Canarias.
¿Cuáles son los objetivos marcados por Canaragua para contribuir a la reconstrucción social tras la pandemia del Covid-19?
Nos centramos en lo que hemos querido denominar el pacto social. Es lo que ofrecemos a nuestros interlocutores para hacer una reconstrucción basada en la solidaridad, la ocupación de calidad y la reconstrucción verde. Nuestros interlocutores son los ayuntamientos, las entidades sociales a través de las que se canaliza la solidaridad, y nuestros trabajadores y proveedores porque cuando decimos ocupación de calidad quiere decir que, ellos tienen que hacer su trabajo obviamente, pero nosotros tenemos que corresponder con formación y con garantías de prevención en materia de seguridad. Por lo tanto, estamos haciendo lo que entendemos por ese pacto social, que es el camino que nos marca la Unión Europea y es lo que nos permitirá encuadrar los fondos de recuperación Next Generation. Esa es la manera, Fondos Next Generation, pacto social y seguir el camino que nos ha marcado la Unión Europea.
¿Qué modelo representa la gestión de Canaragua para impulsar el acceso universal al agua, como recurso esencial?
Canaragua, como todas las empresas del Grupo Agbar, lo primero en que se basa es en la excelencia operativa. Nosotros sabemos que lo esencial es que el servicio en calidad y en cantidad, esté a satisfacción de las personas a las cuales sirve. En segundo lugar, es un modelo de empresa que se basa en ese pacto social al que nosotros le damos un valor superior. Como empresa queremos establecer un contrato social con todos los grupos de interés. Por lo tanto el pacto social no es más que la transcripción de ese contrato social con nuestros trabajadores, con nuestros proveedores, con nuestras administraciones, con las entidades sociales y civiles, con las universidades. Al final, nuestro compromiso es el de establecer un entorno de diálogo, de escucha activa para mejorar el servicio, que es a donde vamos, a la excelencia operativa.
¿Cree que se dan todos los elementos para que esté próximo ese pacto social?
Creo que hemos pasado una época anterior al Covid en la que costaba establecer alianzas para los temas esenciales que teníamos alrededor. Probablemente entonces no estábamos hablando tanto de la vulnerabilidad o inequidad social, sino más de sostenibilidad, cambio climático y economía circular. Creo que hoy, el problema del cambio climático sigue existiendo, pero se nos ha puesto en primera fila todo el tema de la vulnerabilidad social. Esto ha hecho entender a la mayoría de los agentes, que hay que colaborar y cooperar. Por lo tanto, ahora todo el mundo entiende mucho mejor que sólo saldremos de esto si hay una cooperación entre las distintas partes. Como siempre recuerdo, ese es el objetivo de desarrollo sostenible (ODS) número 17.
¿Cuál es la hoja de ruta de la Compañía para afrontar el desafío del cambio climático?
Aunque las urgencias han pasado por otros temas, es obvio que el cambio climático es una de las problemáticas principales que tenemos nosotros, no sólo el mundo, porque el agua es uno de los elementos claves a la hora de actuar contra el cambio climático. Y Canarias es un territorio muy interesante en este sentido, porque es un territorio fragmentado en islas, alejado del continente, con una orografía compleja y una biodiversidad única y distinta en cada isla. Históricamente Canarias ha tenido problemas de tormentas tropicales, ha sufrido desde la disminución de las precipitaciones al aumento de la demanda para uso agrícola, las lluvias son más escasas pero más intensas. Todo esto provoca que tenga que aumentar la capacidad de desalación del agua de mar, por lo tanto el consumo energético aumenta en unos momentos en que el precio está alto, y yo creo que va a continuar alto durante mucho tiempo. A ello se añade otros problemas como los incendios o la subida del nivel del mar. Por lo tanto, insisto en que la problemática de la tropicalización de las islas, hay que afrontarla con cooperación, con la colaboración público-privada y, obviamente, con compromisos.
"Trabajamos para reducir el 90% de emisiones de CO2 y el consumo eléctrico en un 7%, en unos años"
¿Cuáles son los compromisos de Canaragua en este sentido?
La reducción del 90% de las emisiones de CO2, limitar el consumo eléctrico y reducirlo en un 7% en los próximos años. Desde el 2019 el cien por cien de la electricidad que nosotros consumimos proviene de energía verde. Todo eso son compromisos que vamos adoptando en nuestro lado para disminuir los efectos del cambio climático y tienen que ser complementados con esa colaboración y cooperación con las otras partes. No tenemos más remedio que ir por ese camino, aumentar las inversiones para elevar la resiliencia de las grandes ciudades, y apostar por la economía circular.
"Es obvio que no vamos a cobrar el agua a ningún vecino afectado por el volcán de La Palma"
¿Qué acciones contemplan en La Palma para contribuir a mitigar los efectos del volcán?
Ahora lo que hay que hacer es volcarse en todas las acciones de urgencia, y coordinarse con las autoridades que son las que están en el terreno, molestar lo menos posible y ponernos a su disposición. Canaragua gestiona el agua en Tazacorte, por lo tanto lo esencial es garantizar el servicio con la total calidad. Hemos aumentado nuestros medios materiales y personales, para poder actuar en la reparación de tuberías, elevar los análisis, y prever posibles situaciones de urgencia. Por otro lado, es obvio que no vamos a cobrar el agua a ninguno de los vecinos afectados por el volcán. Y cuando hayan pasado los efectos de la erupción, vamos a tener que ver cuáles son las inversiones que necesitamos para restaurar todo lo que el volcán se ha llevado por el medio. Tanto con el alcalde de Tazacorte como con las demás autoridades, estamos en total coordinación para asegurar todo lo que podamos desde nuestros medios.
"En la lucha contra el cambio climático hay que garantizar una transición justa, no dejar a nadie atrás"
Desde Agbar existe una fuerte implicación con los ODS, ¿qué proyectos destacaría en este sentido?
Frente al desarrollo sostenible, tenemos muchos proyectos. Nos estamos centrando en que las infraestructuras no provoquen ninguna alteración en el sistema ecológico circundante y, sobre todo, en la economía circular. En este sentido, una de las acciones más importantes que tenemos en el Archipiélago es la reutilización de las aguas depuradas, porque el efecto del cambio climático reduce la cantidad de agua que hay y necesitamos aprovechar al máximo, dentro de la economía circular, esa agua. Por otro lado, en el marco de los proyectos Next Generation, trabajamos con infraestructuras verdes en San Bartolomé de Tirajana, en Gran Canaria, que preserven la biodiversidad en el paisaje.
"Innovamos en la reutilización del agua depurada y en infraestructuras que no alteren la biodiversidad"
El talento y la investigación es otra de las apuestas de la Compañía, ¿qué acciones desarrollan en este campo?
A corto plazo, una de las innovaciones en las que trabajamos es la digitalización de todas nuestras operaciones. Tenemos varios centros de control Dinapsis, que nos permiten digitalizar todas nuestras operaciones, además de hacer una investigación en tiempo y en cooperación con otras personas y entidades, y conectar con la ciudadanía para que vean lo que hacemos. A largo plazo, trabajamos en infraestructuras para paliar los efectos del cambio climático. En definitiva, la actuación que nosotros hagamos en cuanto al cambio climático es muy importante, pero tenemos que crear una hoja de ruta por parte de todos para llegar al objetivo de la Unión Europea que es el de cero emisiones de carbono en 2050. De ahí la importancia de una colaboración público-privada, y de garantizar una transición justa, porque no podemos dejar a nadie atrás. La lucha contra el cambio climático está en el centro de la hoja de ruta de los ODS.
"Desde el año 2019, el cien por cien de la electricidad que consumimos proviene de energía verde"
¿Ha modificado la pandemia del Covid-19 la agenda y las prioridades de la Fundación Acuorum Iberoamericana Canaria de Agua, que preside?
El eje central de la Fundación sigue siendo nuestro programa denominado Becas Talento que iniciamos en el año 2017, para aquellas personas que, sin nosotros, no podrían tener acceso a la Universidad. En estos momentos, con el acuerdo establecido con el Colegio Heidelberg en Las Palmas de Gran Canaria, tenemos 19 becados en sus estudios de bachillerato internacional en ciencias y universitarios.
