El presidente de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo, explica que las multas impuestas por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil por conducir bajo la influencia de drogas crecieron un 74% desde el 2019 hasta el 2021. Y aquellas sanciones por exceso de velocidad que se aplicaron sin parar al infractor crecieron durante el año pasado un 328,78% en Canarias respecto a las cifras del 2019. Este tipo de sanciones, denominadas oficialmente como por velocidad con radar móvil sin parada, sumaron 13.727 en el 2019; 23.742 en el 2020, y 58.859 en el 2021.

A juicio de Arnaldo, utilizar coches camuflados para multar, mediante la captación de una foto impide que los agentes vayan más allá de su función recaudatoria, puesto que presuntamente ese modelo de actuación no sirve para amonestar, corregir y evitar situaciones de riesgo por parte del infractor tras ser detectados por los funcionarios. Según el representante de AEA, «no estamos de acuerdo con esa política de esconder radares», en la medida en que no se intercepta a quien va al volante, se le identifica sin ningún género de dudas y se le advierte de su conducta temeraria, que puede tener consecuencias negativas para el propio infractor, así como para otros usuarios de la vía.

Las multas por alcoholemias positivas descienden un 40 por ciento entre 2019 y 2021

Arnaldo señala que, al analizar los datos de sanciones en el Archipiélago durante los tres últimos años, «hemos visto que hay un incremento de las denuncias, en general». En base a los datos que han trascendido, en las islas se impusieron 199.113 en el 2019; 152.001 en el 2020, y 211.250 en el 2021. Es decir, que las multas bajaron un 23,66% entre 2019 y 2020, pero crecieron un 6,1% entre 2019 y 2021.

Exceso de velocidad

En el conjunto de los periodos analizados, destaca que la infracción que acumula más sanciones es el exceso de velocidad, tanto en la variedad de los radares móviles con vehículos camuflados, los radares móviles con coches rotulados, así como mediante los radares fijos en tramos señalizados para que el conductor reduzca la velocidad.

Si en el 2019, la suma de multas por exceso de velocidad en Canarias llegó a 105.884, esa cifra se redujo a poco más de 80.000 en el 2020, pero en el 2021 aumentó hasta los 119.140, lo que representa una subida del 12% entre el año precovid y el pasado ejercicio.

En el ámbito de las infracciones por circular sin el permiso de circulación del vehículo, bien por carecer del mismo o por tenerlo anulado, cabe destacar que han subido cerca de un ocho por ciento. Si en el primer año analizado hubo 378, en el 2021 se contabilizaron 408. No obstante se ha producido una ligera reducción en las sanciones por carecer de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) (un 3,31% menos). En el pasado año fueron detectadas un total de 23.733 irregularidades por dicho motivo, tanto por no someterse a la citada inspección como por dar desfavorable y no corregirse la deficiencia.

El presidente de AEA destaca como elemento positivo la reducción en un 40% de las sanciones por circular bajo los efectos del alcohol. En 2019 se instruyeron en el Archipiélago 6.348 multas por alcoholemia positiva. Y en el 2021 este parámetro bajó a 3.865 infracciones.

Como aspecto negativo, destaca las sanciones por conducir bajo los efectos de las drogas, que se ha elevado en un 74%. En 2019 las estadísticas de la Dirección General de Tráfico reflejan que se localizaron a 1.892 conductores que circulaban con presencia de estupefacientes en su organismo, en 2020 hubo 1.026 y en 2021, 3.304.

Las infracciones notificadas al organismo competente por circular sin llevar puesto en cinturón también han aumentado casi un 12%, al pasar de 5.103 a 5.712 entre el 2019 a 2021. Y el crecimiento (15%) también se aprecia en las multas por no llevar o usar el sistema de retención infantil.

Las sanciones bajaron un 4,4% por la utilización del teléfono móvil al volante. Sin embargo, creció el uso de otros dispositivos visuales y de sonido, como pueden ser pantallas y sistemas de geolocalización. Este parámetro creció un 20,5% en 2021 respecto al último ejercicio antes de la pandemia por Covid.

Este año, la cifra de muertos en carretera hasta el 9 de junio fue de doce, cinco más que en el 2021

Arnaldo considera que las cifras de siniestralidad y fallecimientos en carretera en lo que va de año ofrecidas por el director general de Tráfico, Pere Navarro, no se ajustan a la realidad. Navarro hablaba de un descenso el pasado jueves. Sin embargo, AEA aclara que en el presente ejercicio, comparado con el 2021, ha habido un aumento del 22% en las víctimas mortales, desde el 1 de enero hasta el 9 de junio, pues se pasó de 377 a 463. Esa idea también resulta válida para el Archipiélago. Hasta el pasado jueves, en Canarias hubo 12 personas muertas en siniestros viales, por las siete que se contabilizaron en el mismo periodo del 2021. Y ese crecimiento también se aprecia en todas las comunidades autónomas, excepto en Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha, Galicia y País Vasco.

Mario Arnaldo considera que resulta positivo que la Dirección General de Tráfico esté abierta a implantar en España el permiso de conducción B1, con el objetivo de que personas de 16 años tengan un acceso escalonado a la movilidad eléctrica. Así, podrán conducir vehículos de reducido tamaño, eléctricos y que precisan de escasa energía para moverse. Comenta que «llevamos pidiendo esto hace mucho tiempo», entre otras cosas «porque no es una novedad lo que se quiere aplicar en España; ya funciona en países como Francia y está contemplado en una Directiva Comunitaria», señaló el presidente de AEA.

Para Arnaldo es positivo que los jóvenes realicen un acceso progresivo a la conducción. Sin embargo, no comprende por qué la medida se limita o se orienta especialmente a la conducción de vehículos eléctricos.