Un error u olvido, comprensible en una persona que tiene 81 años y una discapacidad reconocida del 86%, parece estar detrás del sorprendente caso del vecino de Alicante que ha sido dado por muerto y que además de no tener acceso a sus medicamentos para su diabetes y sus problemas cardiacos se ha quedado este mes sin cobrar su pensión no contributiva. Juan Ramón Santiago regresó hace unos meses a Alicante tras residir durante una década en la provincia de Málaga y lo hizo sin haber llevado a cabo la declaración anual que se exige a los pensionistas para recibir sus prestación ni haber pedido el traslado, lo que podría ser el origen de su "muerte" para el sistema de la Seguridad Social.

Desde la Generalitat, en la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas están intentando agilizar en Alicante el alta de esta persona en el sistema para que pueda cobrar cuanto antes su pensión y se le restablezca el derecho a sus medicamentos gratuitos como pensionista.

Sin embargo, al no estar empadronado aún en Alicante no se ha podido completar este trámite para levantar la suspensión que tiene en el Instituto Nacional de la Seguridad Social. Asimismo, están intentando recabar información de la consejería de Andalucía para aclarar la situación en la que está Juan Ramón.

Lo que sí es cierto, pese a la buena predisposición de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, es que Juan Ramón no parece que vaya a cobrar hasta finales de octubre la pensión.

"A ver cómo comemos", se lamenta Juan Ramón desde su domicilio de Alicante mientras pide ayuda de la Administración a través de este diario.

Este pensionista discapacitado ha asegurado a este diario que acudió el pasado viernes a Servicios Sociales del Ayuntamiento de Alicante para exponer el problema que tenía y le dieron cita para el próximo mes de noviembre.

Juan Ramón intentará solucionar el problema de su empadronamiento este martes y una vez obtenga el certificado acudirá a unas oficinas de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas en Alicante para presentarlo.

El pensionista acudió la semana pasada con miembros de su familia al centro de salud del barrio donde reside, La Florida, y allí le dijeron que figura como dado por muerto desde el pasado 8 de septiembre. El viernes acudió a la Seguridad Social y este lunes ha acudido de nuevo al centro sanitario, donde le han dicho que se busque un abogado. Mientras tanto, Juan Ramón sigue sin pensión ni medicamentos.