La consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias, Noemí Santana, adelantó que el Archipiélago no contará con una nueva ley de protección de la infancia como habían comprometido. El anuncio lo realizó ayer en la comisión de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud celebrada en el Parlamento de Canarias, tras una pregunta de la diputada nacionalista Cristina Valido. «Habíamos hecho un encargo a la Universidad de La Laguna para elaborar la primera parte del texto normativo y así se hizo. Ese trabajo está hecho pero los técnicos nos dicen que hace falta pulir algunas cosas de ese texto y necesita una actualización. Esto ha hecho que se nos dificulte, con el poco tiempo que queda de legislatura, que pueda salir adelante», anunció. Santana se escudó en la aprobación, en abril del año pasado, de la Ley Orgánica 8/2021, de 4 de junio, de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia, conocida como Ley Rhodes para justifica dicho retraso de la normativa canaria.

«La ley estatal es una revolución y el paso adelante histórico que se ha dado por el Gobierno del Estado para aprobarla lo debemos de ver como una oportunidad de adaptar una ley autonómica que, de haberla aprobado, se hubiese quedado caduca», explicó.

Por su parte, Cristina Valido afeó que usará dicho pretexto para justificar el incumplimiento de un compromiso adquirido al principio de la legislatura. «Hay cuestiones que son urgentes, nos queda esperar que vea la luz en la siguiente legislatura y que esos trabajos avanzados puedan llegar a los grupos y ver en qué punto estamos y los plazos para una nueva ley. Lamentarnos no nos va a servir de nada», subrayó.

Aún así, Santana adelantó que la idea es dejar todo el trabajo listo para que la nueva ley pueda aprobarse en cuanto se inicie la siguiente legislatura y defendió que han ido mejorando la situación de las familias y los menores con los instrumentos con los que cuentan. «Canarias se merece una nueva ley de la infancia», sentenció.