La preocupación crece entre los facultativos del Hospital Universitario Materno Infantil de Canarias y los familiares de los pacientes ante la demora de la construcción de la torre de especialidades pediátricas. Y es que la obsolescencia de las instalaciones actuales pide a gritos materializar este ambicioso proyecto, que se encuentra sobre la mesa desde 2017, para poder mejorar la calidad asistencial. «Estamos bastante desilusionados porque este asunto debería haberse tratado por la vía urgente, pero Sanidad ha escogido la vía ordinaria y esto va a retrasar aun más el proceso», lamenta el doctor Carlos Lodos, especialista en Hematología en el citado centro sanitario capitalino. Ante esto, los profesionales, gran parte de los pacientes y sus familiares participarán el domingo, 6 de noviembre, en una marcha reivindicativa que partirá de la plaza de Belén María y concluirá en el parque Santa Catalina. La cita se prolongará entre las 10.00 y las 14.00 horas, y estará amenizada con carrozas y actuaciones.
Hay que recordar que el pasado 29 de septiembre, el Gobierno de Canarias autorizó la realización de un gasto plurianual cifrado en 48.141.973,68 euros, a distribuir entre el presente año y 2025, para ejecutar las obras de construcción de la nueva torre tras subsanar el error detectado el pasado agosto en los pliegos. Tal y como explicó la Consejería de Sanidad, «el concurso se realizará por procedimiento abierto de adjudicación y tramitación ordinaria». El plazo de ejecución es de 36 meses. «Han asegurado que este asunto es prioritario, pero no lo han demostrado con sus acciones. ¿Qué va a pasar con el Materno a lo largo de estos años?», cuestiona el especialista.
Carencias
A juicio del profesional, el centro presenta múltiples carencias. «Para empezar hay que arreglar la fachada, porque se está cayendo y todavía no se han tomado medidas», señala el doctor Lodos. A nivel interno, resalta el mal estado de las cañerías y las canaletas, así como las características de muchas habitaciones. «Cada vez son más los pacientes de 14 años que se ven obligados a compartir habitación con niños más pequeños. Las Unidades de Pediatría se están quedando cortas y esto hace que tanto los padres como los niños estén hacinados en estancias con cuatro camas, un baño obsoleto y unas instalaciones que no van de la mano del siglo en el que estamos», subraya.
«Han asegurado que el asunto es prioritario, pero no lo han demostrado», lamenta Carlos Lodos
Otra de las preocupaciones son los trasplantes alogénicos –aquellos que requieren células madre de un donante para poder reemplazar la médula ósea–, pues todos los pacientes de Canarias menores de 15 años que precisan someterse a esta técnica deben trasladarse a la Península. «Para esto necesitamos contar con una unidad nueva. En la actualidad, los pacientes de 15 años en adelante pueden someterse a este procedimiento en el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, que es el centro de referencia, pero el resto tiene que irse fuera de las Islas», asevera.
Con el fin de evitar el desplazamiento de un gran número de familias, la nueva torre dispondrá de dos cámaras especiales para trasplantes alogénicos de médula ósea. «De este modo, no tendrán que sufrir el trasiego de irse a otras comunidades, ya que muchas veces pueden pasar hasta un año fuera de sus casas», agrega Carlos Lodos.
La nueva edificación, que contará con ocho plantas útiles –seis de altura y dos bajo rasante–, permitirá que el Materno aumente en 13.000 metros cuadrados su extensión. La torre tendrá cuatro niveles de hospitalización, un servicio dedicado a Neonatología, otro a la Rehabilitación Infantil –que se trasladará del Hospital Juan Carlos I– y una unidad de internamiento breve de Psiquiatría Infantojuvenil. «Solo pedimos que de una vez por todas se tengan en cuenta las necesidades de los pacientes. Todos los padres y madres están muy enfadados porque se han dado cuenta de que el conflicto no se ha priorizado y que está en juego el bienestar de sus hijos», insiste el hematólogo.
Renovación del centro
«Necesitamos contar ya con la torre de especialidades pediátricas para poder ofrecer una mejor atención a los pacientes, pero también urge renovar las instalaciones del Materno y poco se habla de esto», sostiene el doctor Carlos Lodos. Y es que, en palabras del facultativo, ha sido posible crear nuevos espacios en el hospital, como la unidad Psiquiátrica Infantil, «a costa de restarle espacio a otras especialidades». «Son servicios esenciales, pero no se debe olvidar que este centro precisa una reforma y que no podemos seguir por el mismo camino», apostilla el especialista.| Y.M.
