El cáncer de mama provoca en las mujeres un gran impacto psicológico asociado a la identidad femenina, la imagen corporal y autoestima, sexualidad y maternidad. Según los datos facilitados por la Asociación Española Contra el Cáncer, este tumor provoca en el 50% de las mujeres un gran impacto psicológico, una de cada dos pacientes presentan disfunciones sexuales y hasta un 70% de las mujeres presentan ansiedad debido al miedo al futuro y a las recaídas.
Haidé Hernández, psicóloga de la Asociación Española Contra el Cáncer en Las Palmas, señala que las pacientes con cáncer de mama llegan a la consulta con una sintomatología de tipo ansioso o deprimida, debido al impacto del diagnóstico. Y en una etapa posterior, aparecen otros objetivos terapéuticos como son el impacto en la imagen corporal, el tema de la autoestima asociada a los efectos secundarios de la quimioterapia, el impacto en torno al riesgo de mortalidad, el miedo a la muerte, y las incertidumbres asociadas al diagnóstico.
«Hay muchos mitos asociados a la enfermedad del cáncer, por eso, en las etapas iniciales de la consulta vamos a hablar de la enfermedad, entender bien la información médica, y qué repercusiones va a tener en su vida familiar, laboral y personal, los roles que solía ejecutar, y como tiene que hacer una reestructuración familiar», indicó la especialista.
Respecto a los retos en los que hay que trabajar en este campo, Haidé Hernández señaló la necesidad de impulsar una mayor facilidad de acceso a las pacientes al apoyo psicológico, «porque los especialistas en psicología oncológica somos profesionales externos al hospital, y a veces las pacientes no conocen la posibilidad de este servicio, porque no está integrado en el hospital».
Apoyarse en una red de vínculos con sus seres queridos y tener una buena comunicación con su médico, entre las recomendaciones de la especialista
Apuntó también el handicap de que las mujeres tardan mucho en llegar a este servicio tras el diagnóstico; y la necesidad de que adapten su vida a todos los cambios que se producen por la enfermedad. «Va a haber un impacto en todas las áreas vitales, por eso van a tener que improvisar, tomar muchas decisiones en poco tiempo para adaptarse a las demandas de la enfermedad y el tratamiento».
Entre las recomendaciones que aporta la psicóloga a las personas que van a pasar por el proceso de la enfermedad para fortalecerse, señala la importancia de que se apoyen en una red de vínculos con sus seres queridos, "sentirse muy acompañada en este proceso, permitir recibir ayuda, acudir a asociaciones o lugares especializados para que puedan tener una información veraz para mejorar o atender todas las necesidades que les surja de forma personalizada".
También destacan la importancia de que tengan una buena comunicación con sus médicos, "donde puedan expresarles sus necesidades para que ellos a su vez les puedan recomendar los lugares especializados. Sería bueno que estuvieran acompañados psicológicamente hasta que consigan reforzarse desde el punto de vista emocional, detectar sus recursos emocionales para hacer frente a esta crisis vital", concluyó.
