Al hablar o escribir cometemos errores que consisten en pronunciar o escribir mal ciertas palabras o emplear vocablos impropios. Esas prácticas se denominan barbarismos.

Si se pone empeño, estos vicios se pueden solventar sin problema siguiendo una serie de consejos, ya que expresarse de forma correcta dice mucho de la persona que habla o escribe.

Los expertos aconsejan para escribir correctamente, entre otras recomendaciones, las siguientes:

  • leer fijándonos en cómo se escriben los vocablos y expresiones porque cuando leemos es cuando la recordamos de una forma más fácil
  • memorizar las reglas gramaticales y ortográficas más comunes
  • buscar en el diccionario
  • utilizar el corrector si escribimos en ordenador, aunque este último no es del todo fiable

Cuadernos Rubio ha elaborado una lista con los barbarismos más comunes (en negrita la expresión correcta) entre los que se incluyen los que se enumeran a continuación:

  • Idiosincracia - Idiosincrasia
  • Preveer - Prever. Puede deberse a la confusión con el verbo proveer.
  • Beneficiencia - Beneficencia. Tal vez se escriba incorrectamente por su parecido con la palabra ciencia.
  • Visicitud - Vicisitud
  • Suscinto - Sucinto
  • Aférrimo - Acérrimo
  • Excéptico - Escéptico
  • Convalescencia - Convalecencia
  • Discrección - Discreción
  • Esplanada - Explanada
  • Innundación - Inundación
  • Fideligno - Fidedigno
  • Fregaplatos - Friegaplatos
  • Inexcrutable - Inescrutable
  • Misógeno - Misógino
  • Prevadicación - Prevaricación
  • Subrealista - Surrealista
  • Sujección - Sujeción
  • Transtornado - Trastornado
  • Exalar - Exhalar
  • Exhuberante - Exuberante
  • Exumar - Exhumar. Proviene del latín ex + humus (Tierra)
  • Exausto - Exhausto
  • Exibir - Exhibir
  • Exortar - Exhortar