Los amantes de los fenómenos astronómicos están de enhorabuena este noviembre. Eclipses lunares y lluvias de estrellas fugaces son algunos de los que han podido disfrutar los aficionados.

Ahora llegan las Leónidas, estrellas fugaces que se pueden ver por estas fechas, entre el 6 y 30 de noviembre. El mejor día para observarlas es la madrugada del jueves 17 al viernes 18 de noviembre con la luna en la fase menguante, desde la medianoche hasta alrededor de las tres de la madrugada.

En esta ocasión no se producirá una tormenta de Leónidas porque serán de menos cantidad, pero aún así es un episodio que valdrá la pena disfrustar.

El Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) estima que hasta el año 2098 no habrá tormenta de Leónidas, por lo que hasta esa fecha, todas las lluvias de Leónidas que se produzcan serán de muy baja intensidad, no llegando a las 1000 estrellas fugaces por hora.

¿Cómo surgen las Leónidas?

El origen de las Leónidas está en la constelación de Leo. Aunque esta lluvia de meteoros no es tan famosa como las Perseidas, pero también tienen un origen en un cometa, en el 55P/Tempel-Tuttle.

Las Leónidas, según la definición que realiza el IAC, se producen cuando la Tierra intercepta uno de los filamentos de partículas que el cometa periódico Tempel-Tuttle genera al acercarse al Sol. Las partículas cometarias se desintegran en la alta atmósfera terrestre por el enorme rozamiento al que se ven sometidas. En ese momento emiten una gran cantidad de luz visible desde la superficie como estrellas fugaces.