¿Qué es la Fundación Forja y a qué se dedica?

La Fundación Forja es una fundación, sin ánimo de lucro, con sede en la calle Carvajal n•4 de Las Palmas de Gran Canaria y con dieciséis años de experiencia en el acompañamiento y tratamiento a personas con problemas de Adicciones. En la actualidad, además de la intervención psicológica en adicciones, cuenta con otros programas de intervención dirigidos a jóvenes y familias, prevención y hábitos de vida saludable en las aulas, la atención a personas mayores, sus familiares y cuidadores o atención psicológica general.

¿Hay muchos problemas en la sociedad canaria de adicción?

Muchos más de los que a las personas que nos dedicamos a esto o a las personas afectadas, de forma directa o indirecta, nos gustaría. Y a veces muy soterrados. El estigma que ha estado siempre asociado a las adicciones no ha ayudado. Por suerte eso está cambiando.. La sociedad de consumo imperante tampoco ayuda.

¿Y las administraciones públicas ayudan al respecto?

Si. Ayudan y son necesarias. Desgraciadamente, toda ayuda es poca y, en muchas ocasiones, las entidades tienen que recurrir a fondos propios para la estabilidad de sus programas y ofertas terapéuticas.

¿Crees que la sociedad podría hacer más, a nivel particular? Es decir, se sigue estigmatizando y condenando al ostracismo a las víctimas de la adiccion como hace años, o se ve una tendencia hacia una mayor inclusión?

Es una pregunta compleja. O dos. Siempre se podría hacer más. Y también se puede hacer mejor. Pero intento contestar..

Afortunadamente, aunque a coste de nuestra salud, las personas somos cada vez más conscientes de la importancia de cuidarnos. Es cada vez más común que las personas busquemos ayuda profesional y lo hablemos con mayor naturalidad. Eso produce, a su vez, un efecto de mayor normalización y menor estigma.

Por otro lado, antes se tendía más a señalar a las personas consumidoras como bajas de moral o de dudosa voluntad. Hoy, creo, somos más sensibles y empáticos. También estamos mejor formados e informados. Y, por lo general, entendemos que bajo una conducta adictiva suele haber una persona que sufre.

Los hábitos de consumo se han ido modificando. Parece que el abanico ha ido creciendo. Hay sustancias que han estado muy ligadas al ámbito de la exclusión social (cómo son el crack o la heroína). Sin embargo, hay conductas adictivas que poco tienen que ver con la marginación o la exclusión, como son el sexo, las compras o las nuevas tecnologías. Creo que esto ayuda a que la tendencia camine hacia la no marginación. Si bien aún queda mucho camino. Y también depende de otros motivos como la sustancia/conducta problema o el estrato social asociado a dicho consumo. Subrayando que cualquier conducta o sustancia adictiva puede ser usada en cualquier contexto social.

Y para finalizar, que aconsejarías a alguien que cree que pueda ser adicto para buscar ayuda o a alguien que crea que una persona cercana lo es?

Les animaría a que lo hablen. A compartirlo con sus seres queridos. A preguntar, pedir ayuda u ofrecer apoyo. A vincularse fuertemente. A confiar en que cualquier situación o emoción se puede gestionar de múltiples maneras. Y que muchas de ellas les pueden llevar a lugares mejores y más deseados. Y, por supuesto, pedir ayuda profesional. Hay personas muy sensibles y preparadas que sabrán entender, adaptarse y acompañar a la persona en el camino a conseguir los objetivos que se marquen. Incluso al de vivir de forma libre , sana e independiente. O, al menos, un poquito más libre, sana e independiente.