Buceadores voluntarios de Canarias retiran toneladas de desechos en una iniciativa contra la basuraleza

Durante el transcurso del fin de semana, buceadores voluntarios de la Red de Vigilantes Marinos se unieron en la iniciativa "1m2 contra la basuraleza" con el objetivo de retirar desechos en entornos naturales. La convocatoria logró movilizar a miles de ciudadanos comprometidos en mantener estos espacios libres de basura, con el fin de proteger los ecosistemas acuáticos y reducir el impacto negativo que los residuos generan en la vida marina, la cual sufre la pérdida de más de un millón de aves y cien mil tortugas marinas cada año debido a la contaminación.

En esta ocasión, más de mil voluntarios participaron en diversas regiones de España. Uno de los puntos de acción seleccionados fue el Puerto de Vueltas de Valle Gran Rey, en la isla de La Gomera, donde los protagonistas fueron los miembros de Buceo La Gomera y el Club de Buceo Hupalupa La Gomera.

Trabajando en conjunto, lograron retirar un total de 1.200 kilos de diversos residuos del entorno marino. Entre los desechos encontrados se incluían aparejos de pesca, neumáticos, teléfonos móviles, señuelos, alrededor de 300 botellas de cerveza, latas, toldos y nasas abandonadas. Sorprendentemente, dentro de una de las nasas abandonadas se encontró el cuerpo sin vida de un tamboril espinoso, una especie de pez de gran importancia ecológica en Canarias, ya que actúa como depredador natural del erizo de púas largas, que puede causar daños significativos en los lechos de algas.

En otra parte de la isla de La Gomera, los buceadores y voluntarios terrestres del Club de Buceo El Sebadal llevaron a cabo su actividad en la Playa de la Cueva, donde recolectaron 45 kilos de diversos residuos. Entre los elementos encontrados destacaron la gran cantidad de colillas y latas, y se descubrió también un neumático entre los desechos.

En Tenerife, aproximadamente 30 voluntarios del Club Terramare realizaron su intervención en el Porís de Abona, en la zona del Muelle Viejo en Arico. Durante su labor, lograron recolectar 75 kilos de residuos, destacándose cuerdas y sedales entre los objetos encontrados.

Estas actividades demuestran el compromiso y la determinación de los voluntarios en la lucha contra la basuraleza y la preservación de los ecosistemas marinos. Su esfuerzo contribuye a crear conciencia sobre la importancia de mantener limpios los entornos naturales y a proteger la vida marina, promoviendo un futuro más sostenible para las generaciones venideras.