Tras Dubái

La eólica marina reclama la agilización de los proyectos para superar cuellos de botella y los altos precios de suministros

Dentro del mix de renovables, para cumplir con estos planes, a la eólica marina le toca despegar y desarrollarse, aumentando la potencia de los 65 GW instalados en la actualidad, a los 494 GW en 2030, lo que significa multiplicar por más de siete su capacidad

Fuentes de energía eólica.

Fuentes de energía eólica.

Glòria Ayuso

La Cumbre del Clima de Dubái (COP28) se clausuró el miércoles con el compromiso de los 198 países participantes de triplicar la potencia mundial de energías renovables de aquí a 2030, entre otras medidas. Eso significa pasar de los 3.500 GW actuales a los 11.000 GW en un plazo de seis años, para ir menguando la dependencia de los combustibles fósiles y poder limitar el calentamiento del planeta en los 1,5 °C respecto a los niveles preindustriales.

Dentro del mix de renovables, para cumplir con estos planes, a la eólica marina le toca despegar y desarrollarse, aumentando la potencia de los 65 GW instalados en la actualidad, a los 494 GW en 2030, lo que significa multiplicar por más de siete su capacidad. Este reto cuenta, en la práctica, con numerosas barreras, según la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena), que denuncia la “falta de claridad regulatoria y cuellos de botella en la cadena de suministro”. 

Más coste de los proyectos

A ello se suma el aumento de precios de las materias primas debido a la inflación, que ha elevado el coste de los proyectos, según destaca el informe Perspectiva de las Transiciones Energéticas Mundiales de Irena. Los mayores costes de endeudamiento actuales “son motivo de preocupación”, destaca en la misma línea la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en su informe Perspectivas Energéticas Mundiales 2023, ya que “complican la economía de los proyectos y podrían inclinar los cálculos de costes hacia tecnologías (a menudo contaminantes) que tienen menores costes iniciales, pero generan gastos a largo plazo”.

Así será el parque eólico marino que Capital Energy promueve frente a las islas Cíes.

Así será el parque eólico marino que Capital Energy promueve frente a las islas Cíes. / EP

Acción concertada

Frente al riesgo de que los proyectos de eólica marina zozobren, el director general de Irena, Francesco La Camera, ha reclamado en la Cumbre del Clima "una acción concertada" entre el sector público y el privado que incluya "abordar urgentemente barreras sistémicas profundamente arraigadas” propias “de la era de los combustibles fósiles".

En este sentido, el sector reclama “un fuerte compromiso político con la continua construcción” de los nuevos proyectos. La prioridad de esta industria es recortar los costes, por lo que considera que una forma de lograrlo es que las administraciones adelanten el desarrollo previsto de la energía eólica marina, acelerando los plazos y licitando volúmenes mayores a la vez.

“Esto crea una previsión de la demanda que permite evitar la falta de entrega de componentes clave que se necesitan para desarrollar los proyectos, dando un apoyo a la cadena de suministro que puede traducirse en costos más bajos para los proyectos de energía eólica marina en el corto plazo”, indican en un análisis el responsable de Asuntos Externos del Foro Económico Mundial, Rasmus Nikolaj Due Skov, y el director general del Consejo Mundial de Energía Eólica, Ben Backwell, fruto de los problemas expuestos durante la cumbre.

Ventajas fiscales

Estos expertos y el sector de energías renovables también reclaman que las ventajas fiscales que benefician actualmente a la industria de los combustibles fósiles, que recibe subsidios directos, se apliquen a los proyectos de energía renovable, aduciendo que asegurará la obtención de energía limpia en puertos y zonas costeras, con el consiguiente descenso de la contaminación asociada.

Al mismo tiempo, reclaman que los nuevos contratos de energía eólica marina tengan en cuenta la inflación, un aspecto “clave para garantizar la sostenibilidad financiera a largo plazo”, al tiempo que se actualicen los contratos existentes que se han paralizado debido al aumento de los costes.

Impacto en el entorno

El debate sobre cómo acelerar la implementación de la eólica marina no ha dejado de lado otro de los temas más espinosos: el impacto que genera en el entorno. Tanto el Foro Económico Mundial como el Consejo Mundial de Energía Eólica indican la necesidad de “reconocer que ampliar la industria eólica marina al ritmo necesario” para cumplir su parte en la transición energética “puede generar impactos en la sociedad y la naturaleza”. Por ello, señalan que “se deben evitar o mitigar los impactos ambientales y crear apoyo local de manera proactiva para evitar posibles barreras estructurales a la construcción”, al tiempo que los gobiernos “introduzcan criterios mínimos” que permitan en cada uno de los proyectos la presentación de todos los actores energéticos en igualdad de condiciones.

Nueva organización

Con el fin de promover el despliegue de la energía eólica marina, durante la Cumbre del Clima de Dubái se ha lanzado una nueva organización de carácter internacional, Ocean Energy Pathway (OEP), que mediante una "acción global" se propone impulsar esta tecnología.

La nueva organización ha recibido 250 millones de dólares de apoyo en financiación de la también recientemente creada Alianza para la resiliencia oceánica y el clima (ORCA), entidad que se define por estar centrada en promover soluciones basadas en los océanos para luchar contra el cambio climático.