Ni despistes ni radares sorpresa: así propone un experto mejorar el respeto a los límites de velocidad

El periodista especializado en seguridad vial Bernardo Hernández advierte sobre la importancia de informar mejor para reducir accidentes

Conducción temeraria en Gran Canaria

La Provincia

Las Palmas de Gran Canaria

Más de 75.000 conductores fueron denunciados en solo una semana por exceder los límites de velocidad en España, según los últimos datos publicados por la Dirección General de Tráfico (DGT). Un dato que, lejos de ser anecdótico, refleja un problema persistente en las carreteras: el exceso de velocidad, a menudo no por imprudencia, sino por despiste.

En este contexto, el periodista canario especializado en seguridad vial, Bernardo Hernández, plantea una reflexión necesaria: informar mejor para sancionar menos y salvar más vidas.

No siempre es imprudencia

“La reciente campaña de control de velocidad sancionó a más del 6% de los vehículos vigilados”, señala Bernardo Hernández, quien lleva años documentando siniestros de tráfico en Canarias. Según explica, muchas de estas infracciones no son fruto de la temeridad, sino de un “despiste” provocado por la falta de información clara sobre los cambios de límite en determinados tramos.

Está demostrado que el exceso de velocidad por despiste, con buena información y pedagogía, se puede reducir considerablemente. Para el especialista, no basta con poner radares, sino también hay que asegurarse de que el conductor sepa exactamente qué velocidad debe respetar.

Los datos de la DGT

Durante la campaña realizada del 7 al 13 de abril, los agentes de la Guardia Civil controlaron más de 1,1 millones de vehículos en 3.527 puntos de control en toda España. De manera que 75.028 conductores fueron denunciados por superar la velocidad permitida, lo que representa un 6,5%, según cifras oficiales del Ministerio del Interior.

Bernardo explica que este porcentaje, aunque relativamente estable respecto a campañas anteriores, refleja un patrón preocupante: “Muchos conductores priorizan la idea de que en una vía de dos o más carriles por sentido el límite siempre será 120 km/h, y no bajan la velocidad en tramos específicos donde por seguridad o fluidez se ha reducido el límite.”

Mejorar los avisos y hacer pedagogía

Una de las claves, según Hernández, estaría en modificar los avisos de radar para incluir siempre de forma visible la velocidad máxima permitida en ese tramo específico. “Ya se ha comprobado que donde los carteles de aviso incluyen el límite concreto, las sanciones bajan notablemente”, recuerda.

Además, recalca que no siempre los límites son visibles: “Hemos visto casos donde una parada de guaguas oculta el cartel que indica la reducción de velocidad”, añade, subrayando que pequeños fallos como este pueden traducirse en multas o en algo mucho peor.

“No se trata de hacer más denuncias, sino de dar más seguridad”, insiste el periodista. Si se explica bien y se avisa correctamente, los conductores "lo entenderán, respetarán los límites, se normalizarán las velocidades y se evitarán colisiones por alcance”.

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