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Informe científico

Todo el océano del mundo está atrapado en una "triple crisis planetaria": cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación

Un informe de Copernicus alerta de que el calentamiento oceánico se ha acelerado desde la década de 1960 y que el deshielo avanza a pasos agigantados

Los plásticos invaden ya todos los océanos del planeta.

Los plásticos invaden ya todos los océanos del planeta. / Gary Bell / Getty Images

Valentina Raffio

Barcelona

Todos y cada uno de los rincones del océano ya se están viendo expuestos a la amenaza de una triple crisis planetaria. Según apunta el noveno Informe sobre el estado del océano de Copernicus, presentado este martes, las aguas del planeta están siendo expuestas a la peligrosa combinación de cambio climático, pérdida de biodiversidad y polución. Un panel de más de 70 expertos alerta de que estos problemas, que hasta ahora creíamos localizados en áreas concretas, ya se expanden desde el Ártico hasta los arrecifes tropicales y amenazan a innumerables ecosistemas marinos.

El océano absorbe el 90% del exceso de calor provocado por los gases de efecto invernadero. Esa capacidad de amortiguador climático tiene un precio. El informe alerta de que el calentamiento oceánico se ha acelerado desde la década de 1960 y alcanzó un récord histórico en la primavera de 2024, cuando la temperatura superficial media global llegó a 21 grados. Los registros también constatan que las olas de calor marinas son cada vez más intensas y persistentes. En 2023, por ejemplo, algunas zonas del Atlántico pasaron más de 300 días en condiciones de ola de calor y el Mediterráneo registró temperaturas hasta 4 grados por encima de lo habitual.

Algunas zonas del Atlántico han pasado más de 300 días en condiciones de ola de calor y el Mediterráneo ha registrado temperaturas hasta 4 grados por encima de lo habitual

El calentamiento de las aguas también está impulsando una acelerada pérdida de hielo marino. Entre diciembre de 2024 y marzo de 2025, el Ártico registró cuatro mínimos históricos, con una pérdida equivalente a seis veces la superficie de Polonia. La Antártida, por su parta, también sumó su tercer año consecutivo en mínimos, consolidando un retroceso que ya no parece anecdótico, sino estructural. Los expertos afirman que este avance del deshielo reduce la capacidad del planeta de reflejar radiación solar, acelerando aún más el calentamiento global. Además, ponen en jaque a especies emblemáticas como los osos polares y los pingüinos emperador, cuya supervivencia depende directamente del hielo marino.

Aguas más ácidas y contaminadas

Los expertos alertan de que el océano no solo se calienta sino que también se acidifica. Y lo hace con más rapidez en las zonas de mayor biodiversidad, como los arrecifes de coral. El informe advierte que esta doble presión compromete la supervivencia de especies ya en peligro crítico. En gran parte, porque los cambios en la química del agua reducen la capacidad de los corales y moluscos para formar sus esqueletos y conchas, debilitando la base de la cadena trófica marina y afectando a una infinidad de otras especies. Un ejemplo claro es el coral cuerno de alce (Acropora palmata), que está siendo diezmado por el aumento de la temperatura y la acidificación de las aguas.

Cada año más de 10.000 toneladas de residuos plásticos acaban en el mar y su huella ya se nota en todas las corrientes marinas del globo, ya sea a través de microplásticos o de basura de gran tamaño

La tercera pata de la crisis es la contaminación. Cada año, se estima que más de 10.000 toneladas de residuos plásticos acaban en el mar desde países que, paradójicamente, también custodian ecosistemas vulnerables como arrecifes de coral. El resultado es un océano donde microplásticos y macrobasura se acumulan en todas las cuencas y en la que ninguna corriente, por remota que sea, queda libre de esta huella humana. En este sentido, el informe recuerda que estos contaminantes ya han sido detectados en organismos marinos desde el plancton hasta las ballenas, afectando su salud y capacidad reproductiva y hasta han comenzado a entrar en la cadena alimentaria humana a través del pescado y los mariscos.

"Este conocimiento no es solo una advertencia, es un plan para restablecer el equilibrio entre las personas y el océano"

Karina von Schuckmann

— Directora del informe

"La ciencia es inequívoca: el océano está cambiando rápidamente, con extremos sin precedentes y repercusiones cada vez mayores. Sabemos por qué y sabemos lo que significа. Este conocimiento no es solo una advertencia, es un plan para restablecer el equilibrio entre las personas y el océano", afirma Karina von Schuckmann, asesora sénior de Mercator Ocean International y directora del Informe sobre el estado del océano de Copernicus.

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