Las aguavivas volvieron a hacer ayer de las suyas en las playas de San Bartolomé de Tirajana. Si el pasado jueves produjeron picaduras a 69 personas en Playa del Inglés y San Agustín, este viernes la Cruz Roja tuvo que atender a otros 20 bañistas en Maspalomas por la acción de estas medusas, que en los últimos días están presentes en la costa sur de Gran Canaria.

Sobre las tres de la tarde, coincidiendo con la pleamar, los miembros de Cruz Roja que vigilan las playas izaron la bandera amarilla de precaución con el baño y también la de medusas ante la presencia de estos pequeños organismos marinos en la orilla de la playa. Fue entonces cuando atendieron a la veintena de personas por las picaduras, aunque, según informaron fuentes de la institución, no hizo falta trasladar a ninguno de los afectados a un centro de salud.

En todo caso, el número de personas atendidas es mucho menor al que tuvo lugar el jueves, cuando una plaga de aguavivas apareció sobre las tres de la tarde en Playa del Inglés y San Agustín, que hizo que los socorristas atendieran a un total de 69 bañistas, de los que dos tuvieron que ser trasladados a centros de salud.

Bandera roja

Debido a la numerosa presencia de estas medusas, que eran visibles en la orilla de la playa, Cruz Roja tuvo que alzar la bandera roja que desaconsejaba el baño a los usuarios porque muchos de ellos ya habían sufrido los efectos de sus picaduras.

Los casos ocurridos durante estos dos últimos días en esta zona de la Isla no han sido los únicos durante el último mes. Ya a finales de octubre, los miembros de la organización atendieron a 80 personas por los mismos motivos