Una alerta de bomba en el interior de la Base Naval de Las Palmas de Gran Canaria obligó ayer al Cuerpo Nacional de Policía a cortar la circulación en la calle Mesa y López, que quedó completamente vacía durante aproximadamente una hora. Una mochila abandonada de forma precipitada por un viandante provocó el revuelo, que finalmente terminó en una falsa alarma.

Un ciudadano de origen africano entró ayer a la carrera en la Base Naval y, después de encararse con el suboficial de la Guardia Militar, tiró la maleta que portaba y salió corriendo. La acción activó el dispositivo de seguridad en caso de posible atentado con bomba aseguraron fuentes conocedoras de lo sucedido.

Varias unidades del Cuerpo Nacional de Policía cortaron los accesos a Mesa y López y a la Base Naval sobre las 14.35 horas mientras esperaban la llegada de los Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (Tedax). Antes de su intervención, una unidad canina de la Policía se acercó al posible artefacto explosivo, descartando la opción tras olisquearlo, hecho que confirmaron poco después los agentes del Tedax.