Los tres focos que el pasado sábado prendieron en el perímetro del Parque Nacional de Garajonay no eran los primeros que ocurrían este año en la zona. Precisamente el fin de semana anterior otros tres conatos intencionados se declararon en tramos cercanos al citado parque que pudieron ser atajados por los retenes de medio ambiente antes de que comenzaran a prender entre la vegetación, según indicaron ayer varios agentes forestales, quienes apuntaron que el autor o autores del fuego, que ayer fue declarado como estabilizado y que ha calcinado hasta el momento 3.100 hectáreas en La Gomera, podría haber preparado a conciencia el fuego debido a que su inicio se produjo en una hora clave en la jornada laboral de este parque.

En opinión de los trabajadores de la cumbre de la isla colombina, lo ocurrido parece tener un orden estudiado. El horario en el que se inició, cuando el termómetro marcaba su máxima temperatura y era el momento clave en la organización del organigrama de los empleados, hace presagiar que ya se había maquillado con anterioridad. Esa idea la fortalecen con los conatos que durante los últimos meses habían tenido lugar en las proximidades del parque, entre ellos tres a finales del mes de julio en el que no prendieron "debido a que las condiciones atmosféricas eran más frescas" que las del pasado fin de semana, declaró un agente.

Esta misma idea mantiene el presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, quien en declaraciones a los medios de comunicación aseguró que estos fuegos "no son producto de la naturaleza, sino del hombre", y aportó el dato de que durante este año "La Gomera ha sufrido más de 20 incendios y conatos de incendio", por lo que "aquí hay que hacer una reflexión sobre qué hacer y qué está ocurriendo con el origen de los incendios".

Durante esa intervención, que realizó junto al vicepresidente del Gobierno de Canarias, José Miguel Pérez, quien ayer visitó las zonas más afectadas por las llamas; Curbelo adelantó que el fuego se encontraba ya estabilizado tras los informes realizados por los técnicos medioambientales y que el nivel de emergencia pasaba del dos al uno, por lo que la dirección del control y extinción es asumida por el Cabildo insular.

Sobre las consecuencias que podría tener en el turismo, el máximo mandatario cabildicio aseguró que existe "una herida en el sur del parque", pero "desde aquí invito a que vengan a la Isla" porque "es verdad que la Fortaleza de Chipude ha resultado afectada, pero la Fortaleza sigue existiendo y también la hospitalidad de los gomeros".

Tras la reducción del nivel de emergencia, durante el día de hoy los miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) abandonarán la Isla, aunque se espera que continúen algunos medios aéreos de cara a los próximos días cuando se prevé un aumento de temperaturas que pueda provocar que rebrote algún foco caliente.

Por su parte, agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil en La Palma, con el apoyo de un equipo de la Comandancia de Santa Cruz de Tenerife, continúan con la investigación para esclarecer cómo se inició el fuego y quiénes, supuestamente, originaron las llamas, según informaron fuentes de la Benemérita, que agregaron que hasta el momento no se ha realizado ninguna detención relacionada con los hechos.