Ocho fuegos, algunos de ellos provocados, en La Gomera y Tenerife endurecieron en la jornada de ayer la lucha contra el fuego en las Islas. A la intensa acción que se desarrolla en el frente Norte del incendio en La Gomera, que sigue activo, se añadieron otros dos focos en la Isla (en Alajeró y Valle Gran Rey, sofocados) y otros cinco en Tenerife. Los incidentes obligaron a desplazar medios aéreos de una isla a otra, sin que estos nuevos fuegos pasaran a una situación de mayor gravedad. Sin embargo, el consejero de Hacienda, Economía y Seguridad del Gobierno de Canarias, Javier González Ortiz, reclamó ayer "la colaboración ciudadana" contra estos conatos, ya que varios de ellos se consideran provocados, y que han exigido aún más esfuerzos a los equipos de extinción ya operativos en ambas islas.

La sucesión de focos supuestamente provocados comenzó de madrugada, en el municipio tinerfeño de Los Realejos. Algo que obligó a destinar al lugar, durante la mañana, a tres aeronaves que en principio debían cubrir el fuego de La Gomera (regresaron por la tarde). Luego se declararon otros fuegos en Tenerife, en Guía de Isora y en Los Silos. Y ya por la tarde, otro en La Esperanza, uno más en la Aguamansa (que tuvieron que refrescar otras dos aeronaves del operativo de La Gomera, y que obligó a que se desalojara el área recreativa y al corte de la carretera) y Güímar.

Pero es que entre medias se detectaron otros dos focos en La Gomera: uno, en Alajeró y otro último en Valle Gran Rey, municipio ya muy castigado por las llamas. A estos conatos, que pudieron ser provocados, hay que añadir otros tres denunciados días atrás por el Cabildo gomero (en Alojera, Alajeró y Hermigua), también sofocados.

En la Isla, el centro de atención de los equipos de emergencias sigue siendo el frente activo entre Las Hayas y Cherelepin. González Ortíz indicó a última hora de la tarde de ayer que el fuego "prácticamente ya no avanza, no hay llamas", aunque precisó que, tal como había vaticinado este martes el técnico jefe del servicio canario de emergencias, Humberto Gutiérrez, "aún nos costará bastante" sofocar del todo el incendio.

Con todo, y a pesar de que el alisio no entró en la zona como se esperaba, la ausencia de vientos fuertes y unas temperaturas que no pasaron de treinta grados permitieron atajar mejor un frente que sigue quemando el corazón del Parque Nacional de Garajonay.

La situación permitió que desde primeras horas de la tarde regresaran la mayor parte de los desalojados del municipio de Vallehermoso (cerca de un millar). Así, de los cinco mil vecinos que llegaron a evacuarse en la Isla sólo permanecen en esta situación unos 150, en los núcleos próximos al foco activo del incendio (Banda de las Rosas, Las Hayas o Chipude).

Además de los afectados por las 39 viviendas expuestas al fuego en Valle Gran Rey, municipio que sufrió el pasado domingo los efectos de una bola de fuego que se desplazó desde el monte hacia el pueblo. Su concejal de Medio Ambiente y Urbanismo de Valle Gran Rey, Guzmán Correa, se mostró convencido de que este municipio gomero "va a salir adelante" , según informó Efe.

Hasta ayer, el perímetro del incendio en el monte gomero (del que también existe el convencimiento de que fue provocado) abarcaba unas mil hectáreas. Se han quemado más de cuatro mil. Casi 800 dentro del parque de Garajonay, si bien su lado más valioso, el Norte, no ha sufrido lo más duro.