Las Fuerzas de Seguridad que buscaban a una mujer desaparecida en Zaragoza y que podría haber sido asesinada por un varón que se suicidó el sábado han encontrado el cuerpo sin vida de una joven, con signos de violencia, en la zona en la que estaban buscando, informan fuentes policiales.

El cadáver fue encontrado por la policía a las 15.45 horas (hora canaria) en el término municipal de María de Huerva, dentro de uno de los túneles próximos a la carretera nacional N-330 en la que la buscaban, oculto entre los matorrales.

Según las mismas fuentes, el cuerpo podría ser el de la mujer de 29 años que la policía y la Guardia Civil buscaban desde el domingo, por la descripción que ha facilitado la familia de la desaparecida y por haber sido hallada en la zona a la que se había referido el suicida en una carta manuscrita.

Sin embargo, hasta que se efectúe la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Zaragoza, a donde ha sido trasladado el cadáver, no se podrá confirmar su identidad ni tampoco conocer las causas exactas de su fallecimiento.

El dispositivo especial de búsqueda, que se inició un día antes, y que ha peinado la zona entre las localidades zaragozanas de Muel y María de Huerva, estaba integrado por más de cien funcionarios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, en colaboración con Unidades Especiales de los Organismos Centrales y auxiliados por agentes de la Guardia Civil.

En la tarde del pasado sábado, la Policía Nacional recibió una llamada en la que se alertaba de la existencia de un coche mal aparcado en el barrio de Valdespartera, en cuyo interior había una funda de escopeta y varias notas.

Poco después, esa misma persona volvía a llamar para asegurar que a pocos metros del vehículo había un cadáver.

Trasladada al lugar, la policía encontró el cadáver de un joven, identificado como José Manuel G. B., de 28 años y vecino de Zaragoza, quien al parecer se había pegado un tiro con una escopeta.

En el interior del turismo había varias notas escritas por el joven, una de ellas de despedida dirigida a su familia y otra en la que aseguraba que él mismo había matado a una mujer de su entorno, cuyo cuerpo había abando- nado en un lugar ubicado entre las localidades de Muel y María de Huerva.

En un principio, los agentes pensaron que se trataba de su novia, pero ésta fue localizada con vida y no fue hasta ayer cuando supieron la identidad de la posible víctima, después de que la familia de una joven presentara una denuncia por su desaparición en una comisaría de distrito.

Más de cien agentes integraron el dispositivo de búsqueda. La búsqueda se centró desde un primer momento entre las localidades de María de Huerva y Muel, un total de 14 kilómetros de caminos rurales y zonas de matorral y arbolado.