Un turista sueco de 73 años perdió la vida ayer cuando se encontraba al pie de la piscina de un hotel de cinco estrellas situado en el oasis de Maspalomas. A pesar de los intentos que se le realizaron para intentar reanimarlo, finalmente fallecía en el lugar. Sobre las causas de la muerte, en principio se baraja que sufrió un infarto, aunque será la autopsia la que lo confirme.

El trágico deceso tuvo lugar sobre las 15.23 horas cuando se dio un aviso al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 en el que se indicaba que un turista se encontraba en parada cardiorrespiratoria cuando se encontraba junto a una piscina de un establecimiento turístico del sur de Gran Canaria.

Una ambulancia del Servicio de Urgencias Canario acudió al lugar mientras un médico que se encontraba hospedado en las instalaciones comenzó a realizarle las tareas de reanimación cardiopulmonar al cliente.

Las maniobras las continuaron los sanitarios que se presentaron en el vehículo de emergencia. Sin embargo, a pesar de los continuos intentos, finalmente se confirmaba la defunción del turista sueco de 73 años, según indicaron fuentes que actuaron en la emergencia.

La principal hipótesis que se baraja es que sufrió un infarto porque, según informaron fuentes del hotel en el que ocurrieron los hechos, el septuagenario se encontraba al pie de la piscina y no bañándose en el momento en el que se desvaneció y entró en parada cardiorrespiratoria.

El cadáver fue trasladado por el furgón fúnebre hasta el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas de Gran Canaria, donde está previsto que durante la mañana de hoy los forenses le realicen la autopsia que determine las causas del fallecimiento.

Asimismo, agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría de Maspalomas se encargaron de colaborar con los recursos y de realizar las diligencias oportunas sobre lo ocurrido.