Nueve personas han muerto y 22 han resultado heridas, seis de gravedad, con cuatro de ellas muy graves, al volcar un autobús de línea, a las 8.45 horas de hoy en la N-403, en Tornadizos, a unos seis kilómetros de la capital abulense.

En el autocar de la empresa Cevesa, que hacía la ruta entre Serranillos y Ávila, con todos los papeles en regla y la ITV pasada hace unos dos meses, viajaban una treintena pasajeros, además del conductor, que ha resultado ileso y que ha dado negativo en la prueba de alcoholemia.

El autobús, de 16 años de antigüedad, partió a las 7.15 horas de Serranillos, y tras hacer las paradas de Villanueva de Ávila, Burgohondo, Navalmoral de la Sierra, San Juan de la Nava y El Barraco se salió de la vía en Tornadizos, a seis kilómetros de Ávila, sin llegar a volcar totalmente, parado por el guardarrail.

El vehículo carecía de cinturones de seguridad para los viajeros aunque no eran obligatorios por su año de fabricación y el delegado del Gobierno en Castilla y León, Ramiro Ruiz Medrano, ha precisado que "el conductor perdió el control y se salió de la calzada por causas que se desconocen y que se están investigando".

Por su parte, el subsecretario de Estado de Interior, Luis Aguilera, ha confirmado que todos los papeles estaban en regla, el tacógrafo también, por lo que hay que "investigar exactamente" lo que ha pasado "porque no hay una causa evidente".

Accidente Ávila

La mayoría de los pasajeros viajaba en la parte derecha del autocar, la más afectada por el impacto, lo que ha provocado que varias de las víctimas salieran "despedidas y aplastadas" por el propio vehículo, según ha referido Ruiz Medrano en el lugar del suceso.

Además, en el lugar en el que ha ocurrido el accidente, en la N-403, la Ávila-Toledo, no "consta que sea un punto negro" en cuanto a concentración de siniestros, según la jefa provincial de Tráfico, Inmaculada Matías.

Uno de los viajeros, Mario Alonso, de 22 años, vecino de Navalmoral, ha relatado a Efe que el conductor iba, al parecer, "pasado de velocidad", y el autobús se ha salido por la derecha, en un cortado de piedra.

La empresa había vendido 32 billetes pero dos de los pasajeros no tomaron finalmente el autobús, según han confirmado los alcaldes de la zona, que está conmocionada por la tragedia, ya que la mayoría son vecinos de esta localidad de la comarcal de El Alberche.

Según los últimos datos facilitados por la Consejería de Sanidad de la Junta, los servicios sanitarios han atendido inicialmente a veintidós heridos, que en función de su gravedad han sido derivados a diferentes centros asistenciales.

En este momento, hay tres heridos muy graves en el complejo asistencial de Salamanca, una niña de 7 años, una joven de 17 y una anciana de 91 años; otra persona muy grave en el hospital de Ávila, un hombre de 30 , y en el mismo centro hay otros dos heridos graves, de 63 y 25 años.

Además en el hospital abulense hay dos heridos menos graves y seis leves en observación de entre 16 y 68 años, y ya han recibido el alta ocho de los atendidos en centros de salud.

Por el momento se desconoce la identidad de los fallecidos y los familiares están siendo atendidos en el polideportivo Carlos Sastre de Ávila, donde se ha instalado el centro operativo con la asistencia de una veintena de psicólogos.

El Servicio de Emergencias de Castilla y León ha habilitado un teléfono de información para los familiares de las víctimas del accidente, el 800 200 112, y además se puede llamar al de urgencias de la Guardia Civil, el 062.

El obispo de Ávila, Jesús García Burillo, se ha trasladado hasta el polideportivo para expresar sus condolencias y ofrecer la asistencia de sacerdotes a los familiares que lo requieran tanto en estas instalaciones como en los municipios.

Juan Manuel Cuenca, de Navatalgordo, ha sido una de las personas que se ha acercado al polideportivo para interesarse por su asistenta del hogar y el hijo de esta, ambos origen chileno, que viajaban en el autobús para ir a Ávila al médico, sin que haya logrado averiguar si están heridos o dónde se encuentran.

El accidente ha llenado de luto a la Comunidad, cuyo presidente, Juan Vicente Herrera, que visitará esta tarde a los accidentados y a sus familiares acompañado del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha decretado tres días de luto oficial (8, 9 y 10 de julio) por el suceso.

Las Cortes de Castilla y León, por su parte, han difundido una nota de condolencia a los familiares y allegados de los fallecidos y expresado el deseo de que los heridos se recuperen pronto, del mismo modo que lo han hecho, a través de sendas comunicaciones, el PSOE e IU.