Los primeros indicios policiales sobre el cráneo humano hallado en el Mont Ventoux, en el sur de Francia, descartan que el resto óseo pertenezca al empresario Publio Cordón, secuestrado en 1995 por los Grapo y cuyo cuerpo fue buscado en varias ocasiones en este paraje. "A priori no tiene nada que ver" con Cordón, reveló una fuente de la Gendarmería apenas cuarenta y ocho horas después de que el cráneo fuera descubierto por unos cazadores en el Ventoux.

Podría pertenecer a un motorista desaparecido hace cuatro años, pues junto al resto se localizaron prendas de vestir habituales entre estos conductores como un pantalón o un pañuelo, indicaron fuentes de la investigación. Pese a que esta es una de las principales hipótesis con la que trabajan los investigadores, tanto los agentes como la familia del empresario piden prudencia y, sobre todo, esperar al análisis de ADN que serán el que confirme si el cráneo pertenece o no al industrial. "El que haya dicho que no pertenece a Publio Cordón sus razones tendrá, pero hay que esperar una versión más contrastada y más seria", afirmó Eugenio Gisbert, portavoz de la familia, quien reconoció sentir "un poco de decepción".