Son especialistas en el robo de carteras y bolsos por el método del descuido entre los turistas, pero también en el asalto a comercios. La Policía Nacional acaba de detener en el sur de Gran Canaria a una banda de cuatro carteristas de origen rumano que estaban especializados en este tipo de hurtos de forma itinerante por los principales núcleos vacacionales españoles.

Su presencia no pasó desapercibida nada más tomar tierra. La Policía Judicial de Maspalomas descubrió a los integrantes de esta banda, que son muy conocidos entre las fuerzas policiales de los núcleos turísticos españoles por su historial delictivo. Por este motivo, se les hizo un seguimiento por si volvían a repetir sus fechorías. Y las sospechas se ratificaron cuando tres integrantes fueron sorprendidos mientras robaban en un supermercado de San Fernando de Maspalomas, al mismo tiempo que el cuarto huía a toda prisa con un vehículo de alquiler con el que esperaba dar apoyo a sus compañeros, al darse cuenta de la operación policial. El cómplice, a pesar de todo, fue localizado en las Palmas de Gran Canaria.

Los miembros de la banda han sido denunciados por un delito de pertenencia a grupo criminal y hurto. Además, se ha comprobado que alguno de ellos estaba buscado por un juzgado de Palma de Mallorca por hechos similares.

La Policía Nacional señala que el modo de trabajo de "estos grupos de delincuentes consiste en desplazarse por periodos cortos de tres o cuatro días por los diferentes destinos turísticos del territorios español, tales como Levante, Costa del Sol, Baleares y Canarias. Durante estos periodos frecuentan los espacios comerciales y de ocio de estas localidades, hurtando las carteras, bolsos o pertenencias que los turistas descuidan en algún momento, aprovechando además la incapacidad de reacción de estos últimos debido al desconocimiento del idioma o de la legislación española, lo que proporciona a este tipo de delincuentes el tiempo suficiente para, tras los tres o cuatro días señalados, abandonar la localidad imposibilitando la localización e intercepción inmediata de estos delincuentes".

Los agentes policiales señalan la importancia de mantener una vigilancia preventiva sobre este tipo de delincuentes, debido a la rapidez con la que se mueven entre los distintos núcleos turísticos, para evitar ser descubiertos tras cometer los robos.