La familia de David Batista, de 32 años, que el pasado viernes mató en Santa Cruz de La Palma a su expareja sentimental, Laura González, de 27 años, ambos padres de una niña de corta edad, rociándola con un líquido inflamable y prendiéndole fuego posteriormente, remitió ayer a la opinión de tenerife un comunicado en el que expresa su dolor por el fallecimiento de Laura y condena de forma enérgica el ataque que ha acabado con la vida de la joven.

A continuación, el texto íntegro:

"Los padres, hermanos y familiares de David condenamos con dureza el acto que ha cometido y lamentamos y sufrimos la pérdida de Laura".

"Para nosotros no hay justificación al acto que ha acabado con la vida de Laura. Nuestro sufrimiento en estos momentos es doble. Por lado, hemos perdido a una persona que formó parte de nuestra familia, a la cual apreciábamos y queríamos. Y por otro lado, este acto atroz e inhumano lo ha realizado alguien de nuestra propia familia".

"En estos momentos tan duros para todos, nuestro dolor está lleno de desconcierto, ya que no sabemos por qué ha sucedido. Queremos expresar todo nuestro apoyo a la familia de Laura, y al mismo tiempo trasladar a la sociedad nuestra más enérgica condena a actos como estos. No hay lágrimas ni papel que refleje lo que estamos sufriendo y lo que en estos momentos sentimos".

"Condenamos la sinrazón, la ira y la locura que ha llevado a David a cometer este acto irracional e inhumano. Sufrimos por el horror de una muerte que nos ha llegado a lo más profundo de nuestro corazón, haciéndonos pasar por los momentos más duros de nuestra vida".

"Queremos decir bien alto: No a la violencia de género, cométala quien la cometa. Que se persiga y se castigue, y que entre todos luchemos para que nunca más nos arrebaten a nadie más".

David Batista, el presunto asesino de Laura González a la que roció con un líquido inflamable y luego le prendió fuego en la tienda de la calle Real en la que trabajaba la joven, fue trasladado el pasado sábado a la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla debido a la gravedad de las heridas que padece, con quemaduras de tercer grado en el 35% de su cuerpo. A la misma hora en la que se trasladaba a David al hospital sevillano, el cuerpo sin vida de Laura González era conducido al cementerio de Santa Cruz de La Palma para recibir sepultura tras la misa que ofició el obispo Bernardo Álvarez en la capilla del Hospital General de La Palma.

Por otra parte, Canarias llora la muerte de Laura González. Ayuntamientos, administraciones públicas y numerosas organizaciones enmudecieron ayer en repulsa al fallecimiento de la joven palmera, víctima de la violencia machista, presuntamente asesinada por su expareja en Santa Cruz de La Palma el pasado viernes. Y es que en casi todos los rincones de las Islas, políticos, personajes públicos y vecinos, dedicaron un minuto del día para homenajear a González y decir "no" a la violencia machista.

El dolor y los aplausos predominaron en todas las concentraciones. Entre ellas, la del nuevo presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, y gran parte del Ejecutivo. En el emotivo homenaje, realizado en la sede de Presidencia del Gobierno, la vicepresidenta Patricia Hernández, destacó que es "necesario" impulsar un pacto de Estado para acabar "con un problema que es de Estado".